El Corpus convierte a Valenzuela en uno de los pueblos más bellos de España
Una cita con Valenzuela, a la que no podemos faltar, situada en pleno mar de la campiña cordobesa, casi en el corazón del centro geográfico de Andalucía nos invita. En el sentido más platónico, se puede decir que vale la pena acercarse a este rincón del paraíso español cuando se trata de contemplar la belleza en sí misma, como un auténtico museo al aire libre que rezuma regocijo ante tan magna obra estética. Ni que decir tiene que no hay nadie hoy en día, que no se haya emocionado e impactado al observar el Corpus de Valenzuela, porque proporciona un derroche de deleite para los sentidos, de una naturaleza etnográfica maravillosa.
El Corpus Christi es el diamante cultural de Valenzuela, una auténtica explosión de luz y colorido, un sello de calidad que, como ha señalado el alcalde don Antonio Pedregosa, el ayuntamiento está volcado en seguir manteniendo e impulsando. Declarado de Interés
Turístico Provincial, por su gran alfombra de serrín floreado con un diseño artístico como pocos otros pueblos han igualado en su imitación. Asimismo casi desde 60 años atrás, muestra el recorrido por las principales calles de la ciudad, en las que previamente unos meses antes se han dibujado con tiza y cal en el suelo, para después impregnarlas del serrín pigmentado con diversos colores en la madrugada del sábado al domingo. Por la mañana, se colocan a ambos lados de la alfombra hileras de macetas, a la vez que engalanan sus balcones con colchas y mantones de manila; hasta que a las 21:00 horas con la llamada solemne de campanas, bajo nuestros pies se pisa con placer la calzada hasta disgregarse lo creado con tanto esmero.
La Concejalía de Cultura del Iltmo. Ayuntamiento de Valenzuela, viene convocando certámenes de dibujos junto a diferentes actividades culturales, con escritores, o la Exposición en el salón de plenos de esculturas y pinturas de Encarnación Rudilla y Ana María Luque respectivamente con que cuenta este año, para engrandecer la celebración de esta festividad, convertida en una de las más destacadas de la provincia y región. Se trata, sin duda de un gran atractivo turístico. Al mismo tiempo es una forma posible de validar un placer singular ante una arquitectura paisajística y pictórica única del lugar, que aunque sea una vez en la vida se merece visitar. Una forma de celebrar el Corpus que no se da en ningún otro sitio de un modo tan peculiar, por eso todo reconocimiento es un digno reclamo de mención.
Además de la muestra de rincones típicos andaluces y altares adornados con los más sorprendentes y variados motivos, los visitantes han podido degustar otros Corpus de músicos violinistas y violonchelistas, pero este año se va a amenizar con el arte vivo de una colla de Gigantes y Cabezudos que vendrá ni más ni menos que de Cataluña. Los habitantes de la localidad se unen en torno a una celebración eucarística que representa el orgullo de la mejor tradición popular, desfilando la Custodia de plata del Neoclasicismo del siglo S. XVIII en procesión, acompañada por los niños de primera comunión, amigos y familias, mujeres de mantilla, y autoridades locales y provinciales, con un gran cortejo musical. Contando como viene siendo habitual con la Banda Sureña de Córdoba para cerrar la madrugada del domingo, en el parque municipal.
Francisco Velasco Rey