EL DÍA QUE CONOCÍ AL ESCRITOR, POETA E IMPRESOR ANTONIO SALAS COLOM

Antonio Salas Colom, lo conocí un día, que llovía fuertemente en Palma. Había estado lloviendo desde la noche anterior y, por la tarde, debía asistir a un acto cultural, que se celebraba en el salón de actos de la Caixa, ubicado en las Avenidas de Palma. Un acto en el que Antonio Salas Colom participaba y un servidor también. Sería allá por el año 1980 y aunque no estuviera organizado por el sin par Esteban Pisón, fue el que, en verdad, llevó la batuta de mando durante toda la velada. Al término de la tertulia, Pisón me presentó -entre otros- al poeta, escritor e impresor, D. Antonio Salas Colom, que estaba acompañado de su esposa Catalina Jaume. Tras la presentación, estuvimos unos cinco minutos hablando del acto. En la conversación, me dijo donde vivía y resultó que éramos casi vecinos, lo que motivó que le acompañase al regreso del acto. Al llegar cerca de su casa, me indicó que, un poco más arriba, estaba ubicada Graficas Salas, donde le podría encontrar para lo que necesitara.
Antonio Salas Colom, era impresor y tenía la imprenta (Graficas Salas) ubicada limítrofe a la calle Aragón, a cinco minutos de mi domicilio, por lo que, a partir de aquel momento, mis visitas a dicha imprenta fueron muy continuas. En esta imprenta fue donde se imprimió la revista Sa Roqueta y posteriormente la revista Arboleda, que, gracias a su generosidad, se pudieron editar ambas revistas, hasta su finalización en 2013. En la revista Sa Roqueta, Antonio Salas Colom, era un colaborador, imprescindible para la buena marcha de la revista, dónde siempre contábamos con sus sabios consejos, por su larga experiencia como impresor y editor de libros y revistas. Ya en las ediciones de la revista Arboleda, el montaje e impresión, recayeron en Miguel Ángel Salas Jaume (hijo de Antonio Salas). Debo decir que, Para Miguel Ángel, la revista, la sentía como si fuese suya, de lo contrario, posiblemente nunca se hubiese podido editar (Sic).
Antonio Salas fue un hombre bondadoso, buena persona, trabajador empedernido, además de poeta y escritor. Su poesía, era a veces humorística, con gracia, pero escrita con inteligencia y sin nunca ofender a nadie. Sus libros eran, la mayoría de ellos, de temas costumbristas, donde contaba la historia de Palma con rigor y gráficamente, pues, en algunos de sus libros, como, por ejemplo: La fuente de las tortugas (1988), narra las costumbres, personajes y acontecimientos trascurridos a principio del siglo 20. Otro de sus libros más conocidos, es El turismo en Mallorca (1992). Dónde cuenta, con rigor, el principio del turismo en Mallorca, acontecimientos sociales, picarescas y anécdotas, con ilustraciones, fotografías, viñetas y recortes de periódicos de la época, que sirve sin duda alguna, para que sepan cómo empezó a engendrar el bum turístico, primera industria de las Islas Baleares.
Como no podía ser de otra manera, Antonio Salas Colom, fue miembro de la Agrupación Hispana de Escritores y participaba en todos los actos culturales que se organizaban, conferencias, recitales de poesía o cualquier otra actividad que se organizara. Siempre acompañado de su esposa Catalina Jaume. Era un hombre culto, al que se le podía preguntar por cualquier tema, él siempre contestaba con voz serena, clara y convincente. En cada número de la revista había siempre un poema de Antonio y un cuadernillo con cuatro páginas, dónde él contaba algunas anécdotas con sapiencia y gracia. le gustaba mucho viajar e ir de excursión los domingos por la Isla, excursiones que él organizaba. Era muy apreciado y querido por todas las personas que tuvieron la suerte de conocerlo y tratarlo, como un servidor.
Antonio Salas Colom nació el 9 de junio de 1919 en Palma y falleció, en la misma ciudad, el 28 de agosto de 2009. Fundó tres imprentas, la última, la ya mencionada Graficas Salas. Escribió 13 libros, el primero de ellos con tan solo 9 años. Algunos de sus libros han tenido un gran éxito, entre ellos, los ya mencionados: La fuente de las tortugas, El turismo ese gran invento, La batalla del Ebro, la que yo viví, Gaspar Sabater, ese hombre, etc. Fue también un gran colaborador de la prestigiosa revista Coll y de diversos medios de comunicación. Participaba en coloquios de radio, especialmente en Radio Balear. Era un hombre abierto, con quien se podía dialogar y pedir consejo, especialmente a la hora de la edición de revistas que fundé. Antonio nos prestó una gran ayuda en el montaje de la revista Sa Roqueta. Sin su ayuda personal y material, posiblemente no se hubiese podido publicar durante 8 años. Gran amigo, sabio en sus consejos, que nunca olvidaré. Recuerdo como disfrutaba, cundo nos contaba sucesos de la tristemente batalla del Ebro, que le tocó vivir y en la que fue herido muy gravemente, de las penalidades que pasaban los soldados y que Antonio, contaba con tal apasionamiento, que se emocionaba. Colaboraba cada domingo en el periódico Última Hora, en el suplemento dominical. No pude asistir a su funeral, por encontrarme por aquellos días, dando el pregón de las fiestas patronales de mi pueblo. Fuiste un hombre de bien, honrado y un empedernido trabajador.
