DESHOJAR LA MARGARITA

El preguntar si te quiere

a una humilde margarita,

puedes llevarte un disgusto

sí a inseguridad, te invita.

Que gran responsabilidad

para esta pequeña flor

todas esperan el sí,

si sale decir el no.

Cuando preguntas si el novio

por siempre te ha de querer,

y te contestan las hojitas

que no te quieren ni ver.

Como te quedas entonces

pensando que, si es sincera,

te vas a quedar plantada

o sin remedio, soltera.

Y si un día las preguntas

si tu amor es muy seguro,

a la pobre margarita

la pones en un apuro.

En verdad la compadezco

menuda preocupación,

saber que depende de ella

si te ha de decir, que no.

Dañara tus sentimientos

como podrás suponer,

con lo frágiles que son

las cositas del querer.

Pues menuda papeleta

estos asuntos provocan,

si ellas quieren decir sí,

y sus hojas se equivocan.

Pero cuando sus hojitas

dicen que solo te quiere a ti

tendrás una alegría gozosa

pensando que han dicho sí.

Para no llevarte sustos

no preguntes, es mejor,

te evitarás el disgusto

que sus hojas digan, no.