Alegoría

Cuando hablo de ti. 

El sentimiento me procura,

tal paz interior y mesura 

que no puedo vivir sin ti, 

mi amada poesía. 

Como el perfume de alhelí, 

que te enreda y engalana, 

tal mesura en la mañana, 

que no puedo vivir sin ti, 

en los momentos, 

que me inspiran.

Poesía, frenesí, 

que el alma, pureza alcanza, 

sea, presta la templanza 

de tenerte, en mí sentir 

y constancia. 

Sea de ambas el latir, 

fusión de melancolía, 

disfrutando, junto a ti. 

En versos, amores y fantasía. 

Sea, pues, la alegoría

de tenerte y de sentirte, 

fuente de sabiduría,

cómo el agua cristalina, 

de un torrente.