Más de un siglo de Moros y Cristianos en Molvízar

Tras 130 años de tradición ininterrumpida, la Pandemia del Coronavirus paraliza la representación molviceña en vivo y en directo de los “Moros y Cristianos”

Molvízar es uno de esos pueblos afortunados en tener su propia representación de los “Moros y Cristianos”. Sin embargo, la suya no es una exhibición más, ya que la historia de este acto se remonta a finales del siglo XIX, desde cuando se ha venido interpretando en directo ininterrumpidamente… Hasta el año 2020.

El espectáculo de “Moros y Cristianos” de Molvízar tiene lugar todos los años el 26 de julio, durante la celebración de las fiestas en honor a su patrona, Santa Ana. Son tres los actos que componen la obra: un primer acto en que los moros arrebatan el control de la villa y capturan al rey cristiano, un segundo acto en el que son los cristianos quienes recuperan el control de la villa y convencen a los moros de que se rindan, y un tercer acto, el llamado “Triunfo del Ave María”, en que un general cristiano desarrolla las bondades de la cristiandad a su homónimo moro, que acaba reconociendo a Cristo como su Dios.

Representación en 1959

El texto que se utiliza para la representación de la función tiene una larga tradición oral, que no fue plasmada en papel, por lo menos que se tenga constancia, hasta el año 1967, cuando se realizó copia en el colegio de Ntra. Sra. del Carmen de Madrid. En los años siguientes se realizaron varios escritos y arreglos, y fue el molviceño José Aguilera, allá por 1980, quien fijó el texto de forma definitiva.

Ahora bien, si hablamos de representaciones, la cosa difiere significativamente, ya que parece ser que las primeras que se dieron se remontan al año 1890, impulsadas por Félix Pascual, originario de la provincia de Granada, tal como relataba la molviceña Consuelo Prados Alonso. Por tanto, el Coronavirus ha causado que 2020 sea el primero en 130 años de historia en no tener representación molviceña en vivo y en directo de los “Moros y Cristianos”, ya que estas actuaciones no se interrumpieron ni siquiera durante los tiempos de la Guerra Civil Española.

Representación antigua

Hemos de destacar la intensa labor que está desarrollando la Asociación de Moros y Cristianos Molviceña, que aparte de sus habituales tareas de divulgación e impulso de esta celebración, este año ha cargado a sus espaldas desarrollar una representación grabada en la que se recojan los momentos más importantes de esta histórica función.

En la exhibición son muchos los sentimientos y contrariedades que entran en juego. Podríamos hablar del orgullo agónico de los moros, que acaban finalmente perdiendo el último reducto de tierra que durante tantos años habían dominado, o de cómo son las palabras las que en último lugar dan la victoria a los cristianos, mientras que la guerra solo sirvió para que se perdieran más vidas en ambos bandos.

Pero, centrándonos en el núcleo de la representación, dos son los sentimientos más aplaudidos por los espectadores. En primer lugar, un sentimiento compartido, que es la valentía, enarbolada por unos para defender su tierra y por otros para ocuparla. Haciendo gala de esta valentía es cuando los intérpretes dan el “do de pecho”, y nunca mejor dicho, ya que aprovechan la ocasión para alzar la voz al cielo y clamar por su fe que la tierra que pisan les pertenece.

Paco Pérez, coordinador de los Moros y Cristianos molviceños durante muchos años

Por otro lado, hemos de tener presente que hablamos de una obra revisada incontables veces a lo largo del tiempo gracias a su tradición oral, y que los hechos distan, como es lógico, de ser objetivos. Quizás sea por ello que hasta el más pequeño de los cristianos es diligente en sus labores, valiente y, valga la redundancia, buen cristiano, mientras que en el bando contrario encontramos los alivios cómicos y los momentos paupérrimos. Pues bien, en la obra son varias las ocasiones en que los cristianos ensalzan las virtudes de su religión, o demuestran su fe con largos y sentidos discursos con voz temblorosa y suplicante, actuaciones que son también muy celebradas por el pueblo molviceño y los visitantes.

La representación de “Moros y Cristianos” da al pueblo de Molvízar el estatus de pueblo de cultura, que ama sus tradiciones, y así lo demuestra lo abarrotada que se encuentra la plaza durante el teatro. Es una fiesta que permite a la población sumergirse en algo que sienten como suyo, en algo tan propio que casi lo llevan en la sangre, que les hace volver año tras año a su pueblo natal, cualquiera que sea el rincón del mundo en que se encuentren. Es por ello que no debemos caer en el desánimo por unas fiestas que no se van a celebrar, pero que sí vamos a sentir en nuestros corazones. Como se dice al acabar la función, “hasta el año que viene si la Patrona quiere”.

Carlos Álvaro Segura Venegas

Molviceño

GALERÍA FOTOGRÁFICA

Banda Municipal molviceña amenizando la función