No al Acoso escolar 2
No al Acoso escolar. Por Toñy Castillo
Quizás a priori, sería necesario enmarcar que se entiende por acoso escolar (Bullying) al hablar de este término, haremos referencia a un tipo de violencia, intimidación o maltrato que recibe un niño por parte de un compañero o compañeros de manera reiterativa y mantenidas en el tiempo, las cuales se dan en situación de ausencia de adultos, producidas bajo la intencionalidad de humillar, someter, asustar o maltratar a un compañero mediante agresiones verbales, físicas, psicológicas, atentando contra su intimidad, su persona y su dignidad. Distinguiendo el acoso de otro tipo de conductas que puedan causar problemas en la convivencia escolar y daños emocionales.
1ª Carta que nos dejan niños y jóvenes.
Testimonio real 16 años (Texto donde se ha respetado la libertad de explicar el dolor sin censuras)
…Yo cuando estaba en mi colegio con mis compañeros me sentía a gusto con ellos, pero un día, no sé porque, todos empezaron a molestarme, a pegarme hasta tiraron piedras a mi coche.
Yo creo que todo empezó por culpa de un compañero, pesado, que siempre estaba jugando a ver quién llegaba el 1º a la puerta…y él siempre me ganaba…
En las clases, aparentemente, no pasaba nada fuera de lo normal, excepto en algunas de ellas, en las cuales parecía que el liante era yo… Pero lo peor pasaba en el patio y en la hora de salir del colegio.
Yo en el patio jugaba con las 2 chicas que me gustaban (que hasta ahora no admitiera que me gustaba una más que la otra). Y mis malos compañeros estaban jugando al fútbol con otros de diferentes clases. Estábamos apartados. Yo no tenía fuerza ¡y para colmo! estaba al lado de las chicas, cosa que me daba un poco de rabia no poderles pegar porque creo que no es la solución, y por otra parte también estaba seguro con ellas porque me protegían de los ABUSONES que eran nuestros compañeros. ¡Pero era lo que era…! Lo que más me gustaba era cuando ellos se iban de excursión y yo no. Por quedarme solo con los grandes y jugar con ellos a fútbol cosa que me gustaba, pero cuando no estaban los de mi clase no podía estar con las chicas para jugar. ¡Pero era lo que había!
A mí lo que me fastidiaba de mis EX – compañeros era que me hacían de todo… yo era como su marioneta. Pero al final se acabó y yo ya no pude más y se lo dije a mi madre o ella se enteró por los morados que llevaba… Así pues, mi madre fue al colegio habló con la directora y con mi tutora y le dijeron: “Que solo son roces de compañero a compañero”.
Pasó un tiempo y seguí igual con las 2 chicas que me gustaban en ese momento y aguantando contra los “CAPULLOS” de mis compañeros que eran los peores.
Pasó un tiempo y al final mi madre fue a hablar con la jefa de estudios para cambiarme de colegio y al final de 5º de primaria irme a otro colegio para volver a repetir 5º.
Lo he ido superando POCO a POCO… pero entre llorando y gritando enfurecido, entre el hielo en las heridas… Pase el “trauma”.
Lo que espero de mi vida es que acabe bien, NO tan mal como empezó… no lo deseo para mí ni para otros.
Ahora me siento con fuerzas para seguir con mi vida actual y adelante.
Mi consejo para tratar a esos “CAPULLOS” que empiezan a molestar a los otros, es que SÍ lo digan, que no lo oculten, que hablen directamente con sus padres y profesores en cuando suceda, que no esperen a que pase 1 año o meses…
Actualmente cuando recuerda su época de niño, aún le inunda el dolor, el texto refleja que después de muchos años aún le sigue doliendo…En esa experiencia de vida se optó por un cambio de colegio, fuera de su población natal, a pesar de un buen comportamiento, le costaba relacionarse con sus compañeros y sus notas estaban siendo insuficientes.
La ayuda psicoterapéutica y refuerzo de la autoestima le está ayudando a superar déficits escolares anteriores, llevando sus estudios actuales con buenas calificaciones. Aunque aún le faltan habilidades sociales, el joven avanza siendo ya capaz de explicar la incomprensión.
Eso sí, el colegio de destino se encuentra a 30 km de su pueblo natal y el joven sigue recordando a sus compañeras de clase que le defendían cuando era más pequeño.
Segunda Carta
Testimonio real 13 años
…No sé porque un día me escondieron mi agenda y no la encontraba y me puse a llorar, y a partir de ese día me molestaban, me tocaban la cabeza al pasar y se reían de mí, pero como teníamos un grupo de clase de WhatsApp, una niña hizo una pregunta sobre los deberes y yo contesté que no lo sabía y entonces todos empezaron a insultarme, me llamaban deforme, que no tenía derecho a la vida, todos contra mí, y no callaban. En clase se reían y por el teléfono me insultaban muchísimo, diciendo cosas que me hacían mucho daño. Fueron muchos días, desde que empezó el curso, en los que se metían conmigo hasta que hicieron que llorara mucho y no deseara ir al cole. Una tarde me puse muy mal gritando, llorando en mi casa y le decía a mi madre que no lo podía aguantar.
Y lo peor es que los mensajes al teléfono los recibía mi madre porque era ella quien llevaba el móvil siempre…
La madre de la niña fue al colegio, y habló reiterativas veces con la tutora, ya que consideraba que no era un tema de niños, sino un tema a actuar, donde el equipo directivo tomó medidas, así como los miembros del equipo que realiza la orientación psicopedagogía en el centro.
La inspección técnica educativa estaba informada sobre el tema. Desde la tutoría y equipo de dirección actuaron informando tanto a los padres y niños agresores de la importancia y consecuencias de este tipo de comportamiento y el sentimiento de tristeza, desolación e incomprensión de la niña agredida.
Actualmente los meses del incesante ataque y maltrato a la menor por parte de sus compañeros está resuelto gracias a la coordinación de padres y comunidad educativa.
Por tal motivo se considera importante trabajar en nuestras aulas: “la educación como eje de interrelaciones que favorezcan la no violencia y si la cohesión social.”
El poema que mi hija presento al concurso de poesía infantil que organiza esta publicación está realizado en un día normal como trabajo de clase de lengua.
Toda la angustia, insomnio, anorexia que mi hija tenia y que había empezado con el principio de curso estaban plasmados en esos renglones .
Ella no sabia o podía explicarme con claridad en que consistía el problema.
Ya había ido al instituto a tratar de enterarme que pasaba pero no me hicieron demasiado caso. Volví a ir mostrándoles la poesía y la cambiaron a otro grupo. A partir de ahí todo ha vuelto a la normalidad.
Por cierto la poesía se titula valentía y el jurado del concurso ha tenido
la gracia de concederle el primer premio en la categoría de 12 a 14 años. Todos van a poder leerla si lo desean.
Pero mi interés en que se enviara a un concurso y que la leyeran otras personas además de su profesora y yo es que me parece un testimonio que expresa con la intensidad del que lo está viviendo en ese momento la sensación que viven estos chicos y que en el caso de mi hija ha tenido un final feliz.
Me he atrevido a escribir este comentario por si nuestro caso puede ayudar a alguien .
Por si os parece interesante publicarla o leerla
este es el texto del que os hablo
Valentía
Miedo, la única palabra que resuena en mi cabeza.
Miedo, esa sensación que tengo al levantarme todos los días.
¿qué es el miedo?
Desde que llegué aquí, para mí, solo ha sido mi peor pesadilla.
Intento huir, escabullirme en los matorrales de mi mente,
Pero es inútil, siempre me encuentra.
Se esconde en los recovecos más inesperados
y aparece justo cuando creías que todo había pasado.
Ya no puedo más.
Quiero escapar de esta isla desierta de mi mente.
A veces pienso que algún día todo acabará,
que algún día se cansará de perseguirme,
pero sé que no es cierto.
Estoy harta.
Ya no puedo seguir así.
Pienso enfrentarlo.
Se acabaron las persecuciones y la huida.
Se acabó el miedo.
Por fin encontré la esperanza, enterrada hace mucho,
lo único capaz de vencer al miedo
Soy más fuerte que tú.