14 febrero San Valentín – A TODA COSTA

Desde luego hay que ser muy “Valentín” para enamorarse, pero todavía es peor no hacerlo.

¡Oh!… el amor es sublime, por eso todos queremos que perdure… caso contrario, tampoco pasa nada, se busca otro que como las ‘meigas, haberlos haylos’.

Se puede pensar que estoy frivolizando, nada más lejos de mi intención solo que en estos momentos el amor de pareja está en crisis y también el tiempo de duración.

Yo vivo entre dos épocas y no puedo decir, en justicia, que lo actual es mejor ni peor, solo diferente. Como todo, tiene su lado positivo y negativo, personalmente soy de la opinión de quedarme con lo auténtico.

El amor se ‘gasta’, que a nadie le quepa duda, San Valentín viene cada año a recomponerlo, pero los sentimientos se deben intentar renovar diariamente.

Hombres y mujeres, que todos remamos en el mismo bote, debemos saber hacer en cualquier momento de nuestra relación, no digo un esfuerzo puesto que si fuese <<esfuerzo>> estaría carente de valor, pero sí una prueba de acercamiento a la comprensión de los problemas y necesidades del otro u otra.

Para esta celebración es común el regalo de rosas entre los enamorados – también se aceptan joyas, apartamentos, yates… y otras bagatelas – pero lo importante es que el regalo se realice desde el corazón ¡Con pasión!

Separar lo efímero de lo duradero es una virtud muy compleja en la actualidad.

¡Paz y amor, colegas!… que la felicidad ‘mimosa’ se instale en vuestros corazones.

Francisco Ponce Carrasco