Tu guardiana

Ella…, eternamente tuya

desde que te gestó en sus adentros.

Desde que escuchó tu latido

respira para ser tu aliento.

Cobijándote entre sus brazos

te regala su firmamento.

Te colma de todo el amor

que para ti guarda en su pecho.

Te acompaña en todos tus pasos.

Ella ilumina tu camino;

ayudándote a crecer aunque

siempre te vea como a un niño.

Tus lágrimas se hacen su llanto.

Tu tristeza induce su duelo.

Solo su magia cura tus heridas

y su fuerza te levanta del suelo.

Su felicidad vive en tu sonrisa.

Su gran designio es custodiarte.

Ella acuna tu alma en su corazón,

es tu guardiana, es tu madre.