Podrá leer el libro entero a través de este enlace “CORAZÓN Y ALMA”

PRÓLOGO

En su prolífica trayectoria literaria y poética, Soledad nos ha regalado palabras de aliento, alegría, pesar, nos ha hablado de la trascendencia de una sola vida y de las vibraciones de la naturaleza. Pero si tuviera que decir en pocas palabras quién es Soledad Durnes Casañal, diría que es la poeta del amor, un amor bien entendido e ilusionado, un amor que no aparta las imperfecciones de la propia idiosincrasia del amor, sino que las abraza con cariño, porque siempre nos sabe transmitir que la recompensa a amar sin límites no es solo para la persona que lo recibe, sino también para uno mismo.

Por eso, cada vez que veo a Soledad me ilusiono, porque es un torrente de pasión por la vida y por los que la rodean. Es una de esas personas que da esperanza y alegría a quien comparte con ella una conversación y que incluso cuando nos habla de las espinas del rosal, tiene presente que si miramos un poco más arriba acabaremos nuestro camino en un hermoso campo de pétalos. Precisamente, me tomo la libertad de escoger un párrafo de su poema “Vidas”, para representarlo:

Esas vidas de lamentos

quejándose por cualquier cosa

verán las espinas de una rama

sin ver la belleza de una rosa.

No quiero por todo lo que he dicho que se piense que Soledad es alguien que se pueda enmarcar en un solo tema, ni mucho menos. En este mismo poemario se habla, además del amor, de penas, de despedidas, de bellos paisajes y de otras muchas cosas. En el fragmento que he recuperado, da una gran lección de saber vivir, y qué duda cabe de que la belleza de la rosa no puede sino contemplarse con unos ojos tan llenos de amor como los de Soledad.

Ella es una mujer fuerte, valiente y luchadora. Se ha enfrentado a situaciones que harían temblar al más pintado, pero a ella nunca le ha temblado el pulso.

Ha decidido cuál es su camino en la vida y lo ha tomado con gallardía. Es alguien a quien admirar por su vida y porque impulsa a sus compañeros y compañeras a seguir adelante con voluntad y optimismo, a luchar por los sueños sin dejar que nadie pise nuestras ilusiones.

No podría citar todas las virtudes que posee Soledad como persona y como artista, pero algo que resume muy bien ambas facetas de su vida es su búsqueda por la perfección. Ya sea en la composición de versos o en la organización de un evento cultural, ella siempre lo da todo, deja hasta la última gota de su ser en que el disfrute de los demás sea máximo y por ello corrijo mis palabras iniciales, Soledad es la poeta del amor generoso.

Con todo mi cariño, para mi admirada amiga Soledad.

Carlos Álvaro Segura Venegas

Vicepresidente del Proyecto

de Cultura Granada Costa