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LA SAETA EN LA CASA DE ANDALUCIA DE VALENCIA

La Casa de Andalucía en Valencia, acostumbra a celebrar casi todos los acontecimientos festivos con arraigo andaluz, como son: Los carnavales, La feria de Sevilla, El Rocío, etc.

El sábado 8 de Abril, celebramos allí la Semana Santa, con un homenaje a la Saeta.

El acto se desarrolló en el escenario de la Entidad, que estaba preciosamente decorado, con una gran Cruz, flanqueada por cirios a cada lado y macetas de lirios morados.

La Presidenta Dª Mercedes Pedraja, tuvo la deferencia de invitarme a participar en el acto, recitando poemas de La Semana Santa. Tuve la satisfacción de estar acompañada por la poeta Amparo Pérez Mengod y tres prestigiosos saeteros que fueron: Francisco Zafra, Fernando Soriano y Antonio Algarrada, presentado el acto por Mª José Romero, con una fantástica exaltación de La Semana Santa. Los saeteros interpretaron alternativamente tres saetas cada uno.

Y a continuación expongo mi actuación:

LA SAETA

La Saeta se canta en varios estilos: por martinetes, por seguirillas, por carceleras y algunos más.

En muchas ciudades se veía como la figura bendita de nuestro padre Jesús, la acercaban a las rejas de la cárcel, donde los presos le cantaban la Saeta Carcelera:

De oro son sus potencias

 y la corona de espinas,

tu la llevas con paciencia,

 sobre tu espalda divina,

la cruz de la penitencia.

 

 Padre Jesús Nazareno,

siento que lleves la cruz

pues yo cargarla no puedo

En cuanto salga de aquí

 yo seré tu costalero.

 

Que no te importe morir

Jesucristo en el madero,

que en ello nos va el vivir

 y nos muestras el sendero

pa poder salir de aquí.

También le cantan a la Virgen:

¡Ay Virgen de la Esperanza!

amparo del presidiario

ampárame porque vengo

al presidio por diez años.

                           

Señora de la Esperanza

comprendo lo que es amor,

con solo mirar tu cara

de amargura y de dolor.

 

Y desde lejos se oía

 las voces de un moribundo,

que en sus cantares decía:

Estoy solo en este mundo

ampárame Madre mía.

Se han cantado saetas para las cosechas, para que llueva, para los enfermos…  La Saeta es un canto que emociona y hace llorar.  He visto más de una vez a un saetero con el pañuelo en la mano, limpiándose las lágrimas por la emoción de la letra y el canto.

Una corona de espinas

en tus sienes te clavaron,

y amarrado a la columna

los judíos te azotaron.

 

¿Donde van las golondrinas

con su pico tan sereno?

A quitarle las espinas

a Jesús el Nazareno.

 

CRISTO DE LA EXPIRACIÓN:

                           

Con la mirada en el cielo,

perdonando al que le grita,

vas acudiendo a la cita

que tienes en nuestro suelo.

Sufrimiento, muerte, hielo…

Siete palabras y luego

queda la muerte de fuego

de tu expirar en la Cruz.

Pero nos dejas la luz

que ilumina nuestro ruego.

Una de las Saetas más conocida es la de Antonio Machado:

Dice un refrán popular:

Quien me presta una escalera

 para subir al madero

 para quitarle los clavos

a Jesús el Nazareno.

Si bien, uno de los poemas más hermosos que he encontrado es de su hermano Manuel Machado, dedicado a la Saeta:

LA SAETA

I
«Míralo por dónde viene
el mejor de los nacidos…»


Una calle de Sevilla
entre rezos y suspiros…
Largas trompetas de plata.
Túnicas de seda… Cirios,
en hormiguero de estrellas,
festoneando el camino…


El azahar y el incienso
embriagan los sentidos.
Ventana que da a la noche
se ilumina de improviso,
y en ella una voz -¡saeta!-
canta o llora, que es lo mismo:


«Míralo por dónde viene
el mejor de los nacidos…»


II
Canto llano… Sentimiento
que sin guitarra se canta.
Maravilla
que por acompañamiento
tiene…, la Semana Santa
de Sevilla


Cantar de nuestros cantares,
llanto y oración. Cantar,
salmo y trino.
Entre efluvios de azahares
tan humano y, a la par,
¡tan divino!


Canción del pueblo andaluz:
…de cómo las golondrinas
le quitaban las espinas
al Rey del Cielo en la Cruz.

 

 

En esta  mi segunda intervención, recité dos poemas marineros:

         José María Pemán, escribe este poema a los que llevaron el paso de la Virgen del Carmen en la isla de San Fernando:

Cargadores de La Isla

mecedla con suavidad,

que lleváis sobre los hombros

a la Reina de la Mar.

 

Cargadores de La Isla:

esa que vais a sacar

es la Virgen marinera,

que huele a marisco y sal;

la que llamaban “Señora”

y “Capitana”, al rezar,

los abuelos que tenían

claras almas de cristal

bajo la recia envoltura

de sus capotes de mar;

la que apacienta las olas

los días de tempestad;

la que esta tarde de julio

el crepúsculo honrará

colgando nubes de grana

por los balcones del mar.

 

Y ya que estábamos en Valencia, recité una poesía de Nicolás Martínez  dedicado a La Semana Santa Marinera:

 MARTES SANTO

 

En barca de pescadores,

a lo lejos por el mar,

viene con sus bendiciones

la Virgen del Cabañal.

 

Por fin llega hasta la playa

donde, cubierta de flores

está la arena que estalla

de júbilo y de oraciones.

 

 Y posa su pie bendito

 sobre la arena más blanca

la Madre de Jesucristo,

que es la madre de esperanza.

 

Y a todos nos maravilla

que de esta hermosa manera,

vaya pisando la orilla

nuestra Virgen Marinera.

 

¡Alegraos valencianos,

venid todos a cantar

como unos buenos hermanos,

a nuestra Virgen del Mar!

 

Engalanad los balcones,

abrid puertas y ventanas

y alzad vuestros corazones

con oraciones marianas.

 

Y cuando cruce la calle

de La Reina o La Barraca,

que el Cielo completo estalle

en luces de flores blancas.

 

¡Ay Virgen de los más pobres,

toda Valencia te aclama

 

con una lluvia de flores

que sobre ti se derrama!

Cerró el acto la Sra. Presidenta, dando las gracias a los participantes por su actuación, a quienes se les hizo un pequeño obsequio, y al público que ocupaba el salón de La Casa, por su asistencia.

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Isabel Pérez Fernández

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