LA ERA DE LA DIGITALIZACIÓN
Recién empezado el año nuevo 2021, nos proponemos nuevos objetivos o metas que bien, no habíamos terminado con el año que se nos ha ido y, otras que no hemos podido ni siquiera comenzarlas. Antes se decía: este año me apunto a clase de inglés, al gimnasio, empiezo una dieta, etc. Aunque lo importante es hacer algo, estar activos. “Nunca es tarde para aprender lo que sea”, dice el prestigioso profesor y neurocientífico alemán, Martin Korton, claro está siguiendo una serie de pautas para que nuestro cerebro sea capaz de dicho aprendizaje.
Pero desde hace unos años la forma de “aprender o estudiar” ha ido evolucionando con las nuevas tecnologías: el uso de internet y las redes sociales se pusieron de moda, hasta el punto de que hoy son imprescindibles para la comunicación en general y nuestro trabajo diario: Twiter, facebook, instagram, watsapp, podcast, spotfy y las distintas App, conviven con nosotros en el día a día de una manera u otra. En definitiva, el mundo ha cambiado con internet, y eso influye mucho en el aprendizaje. Vemos que niños de 4 años o menos juegan con un móvil o una tablet. Esto lo saben bien padres y profesores de alumnos que ven cómo va disminuyendo el uso de libros de texto y también el del diccionario para resolver sus dudas.
Acabamos de leer la noticia de que hay expertos que se preguntan el porqué nuestro empeño en digitalizar la educación cuando los gurús informáticos de Silicon valley, por ejemplo, están criando y educando a sus hijos sin pantallas en carísimos colegios privados. “Los niños hacen sus cuentas con lápiz en cuartillas y usan arcaicas pizarras provistas con tizas de colores”. Lo mismo que hacían los niños de muchos pueblos y ciudades de España, hasta hace sólo unas décadas.
En estos momentos con el uso casi exclusivo del ordenador, el móvil o la tablet estamos olvidando la escritura a mano, los hábitos adquiridos en la escuela o instituto, –tomar apuntes, hacer esquemas, gráficos, resúmenes… que nos ayudaban a estudiar. Korton dice que darle vueltas a la materia para condensarla incrementa la memorización pues el cerebro compensa el esfuerzo almacenado mejor si se ha hecho a mano que con el ordenador. Almacenamos mejor la información si la leemos en los libros (visualizar) que en una pantalla.
Aún sabiendo la necesidad de la presencia física del maestro en el aula, se siguen impartiendo las clases por internet en institutos y en la universidad, debido a la pandemia que en estos momentos nos está azotando. El teletrabajo o trabajo desde casa por internet, es la nueva fórmula que se ha puesto de moda desde que se detectó la pandemia. Sin duda un punto de inflexión nuevo.
VIVIMOS EN LA ERA DIGITAL y se nos han olvidado viejas costumbres, cosas tan sencillas como coger un lápiz o un bolígrafo y sentarnos a escribir, por ejemplo, una carta o una felicitación de Navidad.
El prestigioso cardiólogo Valentín Fuster, decía hace poco en una entrevista que “todo se ha despersonalizado en esta sociedad inestable, guiada por la economía exclusivamente, muchos de nosotros creemos que ese no es el camino, nuestra sociedad acelerada sufrirá un crash mental incalculable”.
CÓMO NOS AFECTA LA PANDEMIA.- Algunos dicen que el COVID-19 tiene un aspecto positivo: nos ha hecho darnos cuenta de lo poco que sabemos y que la Naturaleza tiene más fuerza que la Ciencia. Pero a pesar de esto tenemos que seguir adelante y cumplir las medidas sanitarias y de seguridad impuestas.
Así mismo se han celebrado grandes eventos, unos con presencia de público y otros online, por ejemplo, el festival de cine de Málaga, el Congreso internacional “SANTANDER WOMEN NOW RESERT” organizado por VOCENTO para presentar sus contenidos a través de una multiplataforma que también incluye una web, un podcart, tres newsletter y una serie de webinars en directo. Esto demuestra que durante la pandemia las revistas siguen creando nuevos proyectos y apostando por los eventos de calidad en su versión digital. “Hay que registrarse para asistir en la modalidad online” – comenta su directora Lourdes Garzón. Igual que tantos otros eventos como presentaciones de libros, discos, conciertos, etc. etc.
El último acontecimiento más reciente de esta versión digital fue en el Concierto de Año Nuevo retransmitido desde Viena, este año sin público, cuando en el intermedio aplaudieron a la orquesta miles de personas que se habían conectado a través de su teléfono móvil. Y otra cautivadora escena fue la felicitación de Año Nuevo de las Tierras Altas de Escocia con un ciervo luminoso hecho con drones que iluminaba el cielo nocturno. Los drones estaban guiados usando inteligencia artificial.
Todos estos avances tecnológicos tienen muchas ventajas pero también algunos inconvenientes si no los usamos racionalmente, sobre todo los menores de edad; pueden robarnos datos personales y usarlos indebidamente, saber nuestros gustos, nuestras ideas políticas… y algo muy importante: robarnos nuestro más preciado tiempo. Para que veamos hasta dónde pueden llegar estos avances informáticos observemos el trabajo realizado por Lauren M. Gadner experta en “movilidad biosegura”, profesora de ingeniería, decidió hace años investigar, a través de un modelo informático, cómo el tráfico de personas y mercancías propaga enfermedades infecciosas en nuestro mundo globalizado. Primero estudió cómo se expandió el virus de zika en 2015 y 2016 y el pasado año los brotes de sarampión originados en EE.UU. por la falta de vacunación infantil. Y en enero uno de sus alumnos de origen chino le propuso analizar esta nueva enfermedad aparecida en Wuham. Crearon el mapa lleno de puntitos rojos según avanza el coronavirus, lo pusieron en Twitter, y en un día se hizo viral. En su web (abierta y gratuita) en la que trabajan 24 investigadores, recibe miles de millones de visitas cada día y se ha convertido en herramienta imprescindible para gobiernos, instituciones sanitarias y medios de comunicación. Es el mapa, en tiempo real, de nuestra vida.
En definitiva, debemos disfrutar y ser felices con todo aquello que escribimos, aprendemos y la manera de hacerlo, y, si además tenemos emociones positivas, mucho mejor.
AURORA FERNÁNDEZ GÓMEZ
Mi más querida amiga Aurora del Alba, que bonita se te ve antes de salir el Sol, pues no necesitas para estar guapa ninguna digilicitacion. No te veo con cara digital, pues no te veo los puntitos que esas lucecitas suelen dar.
Ya se sabe que hoy en día predomina la digilicitacion, pero la cara que yo veo tiene dos estrellas que son un primor.
Para ver esos ojos bonitos no necesito la digilitacion pues al natural se ven mejor.