INSOMNIO
Un poema que transita por las noches silenciosas del insomnio, donde la luna, los recuerdos y los propios fantasmas interiores acompañan al poeta mientras espera la llegada del alba como un gesto de esperanza.

Deja abierta tu ventana,
de par en par,
para que te visite el alba.
Noche quieta,
de luna llena y alta.
Has compartido sueños
abrazado a tu almohada,
en un montón de recuerdos
que aparecen como fantasmas.
Noche quieta,
de luna llena y alta.
Has amontonado vivencias
de otras noches largas
en las que sólo había silencios
jugando entre las sábanas.
Noche quieta,
de luna llena y alta.
Deja pasar la luz
de una nueva alborada,
que traspase tu piel de luna,
de ensueños y esperanzas.
Noche quieta,
de luna llena y alta.
«En mi estancia estoy sólo,
con mi luna y mis fantasmas».
Noche quieta,
de luna llena y alta…!

