ESPAÑA ANTES Y AHORA

WINSTON CHURCHILL  dijo que “un buen político es aquel que, tras haber sido comprado, sigue siendo comprable”. Buenos políticos de esta clase los hay en todos los países, pero en la actualidad es en España donde más abundan. Sólo hay que echar un vistazo y ver, oír las palabras que un día dijeron y lo que después hicieron. La memoria falla pero lo escrito queda igual que las palabras registradas en los medios de comunicación. Recordemos las palabras del Sr. Presidente del Gobierno: “Nunca vamos a pactar con el Sr. Iglesias, no podría dormir”.

No solamente pactó sino que lo hizo  Vicepresidente del Gobierno y como regalo, creó un ministerio para su mujer y otro para su socio comunista. ¿Cuánto costó esta compra-venta?  Ahora para dormir seguro que toma muchos somníferos. Tampoco iba a pactar con Bildu. Está claro, a los pocos días hubo pacto, es decir, hubo venta ¿a cambio de qué? Indultos de presos de ETA, traslados, privilegios y muchas cosas más. Faltó a su palabra como persona, como miembro de un partido y como Presidente de España, y todo esto ante todos los españoles, en todas las pantallas de televisión. (los pactos con los separatistas vascos y catalanes lo dejamos para otra ocasión)

Según todos los expertos en economía y en lo político España va a la cola de la Comunidad Europea en todo, excepto en varias cosas que va a la cabeza: el paro, la destrucción de empleo, en el endeudamiento, en el número de ministerios y cargos públicos, en el número de coches oficiales, en la cantidad de asesores con altos sueldos por no hacer nada, en las corrupciones a todos los niveles, la politización de la Justicia, el bajo nivel de la enseñanza… sería interminable la lista negativa de la España actual.

Mi amigo Juan con la vehemencia que le caracteriza me decía: “Ahora para distraer la atención de la ruina en la que han metido a España pues se sacan de la manga eso decretos-leyes como la Memoria Histórica y otras maldades para echarles la culpa al régimen anterior y se ponen a escribir una nueva y falsa historia de España. Pero en absoluto figura en esa nueva historia los miles de asesinados en Paracuellos, tampoco los curas, frailes, monjas y seglares asesinados por el solo hecho de ser religiosos durante la República. Tampoco figuran como consta en las redes sociales (internet) las miles de sentencias de muerte del Sr. Company, líder de Esquerra Republicana y Presidente de la Generalidad de Cataluña que tuvo que hacer un sello con su firma para evitar tanto esfuerzo por el gran número de firmas que tenía que realizar diariamente. Los asesinatos de Calvo Sotelo y el de José Antonio Primo de Rivera tampoco figuran en esa Memoria Histórica y Democrática. Los centros de tortura de las llamadas checas no existieron. La quema de iglesias, conventos y bibliotecas y obras de arte pertenecientes al Patrimonio tampoco, ni el robo del oro del Banco de España, de las Cajas de Ahorro, etc. En esta nueva historia pretenden esclarecer los hipotéticos crímenes de Franco de hace cerca de 100 años pero no los crímenes de ETA, del GRAPO, TERRA LLIURE, y de otras agencias criminales de hace pocos años”.  Y para mayor abundamiento sobre el tema, a aquel régimen le llaman dictadura fascista, y dicen que no había libertades, ¿para quienes no había libertades? Desde luego que los ladrones, los terroristas, los asesinos y todos aquellos aspirantes a políticos que querían comer sin trabajar. Por eso los impuestos eran pocos y pequeños (compárense con los de ahora). Los cargos públicos sólo los esenciales y ningún indocumentado o analfabeto sin preparación podía ocupar un cargo público.

Ahora tenemos una verdadera dictadura con nombre de democracia. Pronto se nos ha olvidado el estado de alarma que la Justicia ha condenado por ilegal. Los tres meses de encarcelamiento domiciliario con la excusa de la pandemia y la nefasta, desastrosa, negligente y criminal actuación del Ministro de Sanidad y de todo el Gobierno. Sin embargo, el Sr. Presidente presume de su gran victoria sobre el COVID, para eso paga bien a los medios de comunicación que han sido los encargados de ocultar la verdad, el dolor, el llanto y la muerte. En cuanto a la seguridad en aquellos tiempos podíamos dejar la puerta abierta porque nadie entraría a robar, ahora con la puerta cerrada te pueden robar incluso hasta la casa; y no sólo podían ir por la calle las mujeres seguras “solas y borrachas” sino también las que iban compuestas guardando la figura y la decencia.

No es mi intención hacer apología de la época franquista, me limito a decir la verdad que consta en la Historia y lo que yo he vivido. Y la verdad incluye decir que Franco nos libró de entrar en la Segunda Guerra Mundial y de que España fuera un apéndice de la Rusia comunista y tuviera por moneda el rublo.

Finalmente le digo a mi amigo Juan que esta nueva historia de España contentará y divertirá a unos cuantos espíritus maquiavélicos llenos de odio y venganza pero no llevará consuelo a todos aquellos que pasan hambre, injusticias que son muchos. Y como toda historia será juzgada y condenada.

Termino con las palabras de Churchill sobre la Guerra Civil española en 1948: “naturalmente no estaba a favor de los comunistas. ¿Cómo iba a estarlo cuando de haber sido español me hubieran asesinado a mí, a mi familia y a mis amigos?”

JOSÉ ANTONIO BUSTOS