ENTREVISTA AL CHELISTA SERGUEI MESROPIAN
Entrevista por Ricardo Campos Urbaneja
Queridos lectores del Granada Costa, para esta ocasión les traigo al espléndido chelista de origen armenio, Serguei Mesropian (25 de Septiembre).
Es un destacado representante de la gran escuela chelista rusa. Sus primeros profesores son los prestigiosos maestros M. Abramyán, G. Talayán. En el periodo de estudios de grado superior acudió a clases con el maestro Mstislav Rostropovich. Ha ejercido la actividad de profesor de violonchelo en el Conservatorio Superior de Ereván y director de la Escuela Musical Oficial de la misma ciudad.
También entre sus variadas actividades fue director artístico de la Orquesta de Jóvenes de la Universidad, realizando varias giras por Europa y Rusia. En su actividad como concertista, ha formado parte integrante de las siguientes orquestas: Orquesta de Cámara Estatal de Armenia (violonchelo solista), Orquesta de Música Antigua y Moderna de San Petersburgo, Orquesta Nacional de Radio y Televisión de Armenia (violonchelo solista. Desde hacer varios años es miembro invitado de la Orquesta de Cámara “Virtuosos de Moscú” bajo la dirección de Vladimir Spivakov. Con las citadas orquestas ha dado conciertos en las mejores salas de música de los cinco continentes.
En el año 2000 fue miembro de un trío de música clásica, junto con el gran violinista Ara Malikian con el que guarda una gran amistad y el virtuoso pianista Serouj Kradjian.
Durante el 2004 realizó una importante gira tanto como solista o impartiendo clases magistrales por Japón, en las ciudades de: Tokio, Osaka, Yokohama, Okayama, Nagasaki, Kioto…
A largo de todos estos años transcurridos, esta colaborando como solista en los conciertos por Japón y España con “Okoyama Nibori Guitar Ensemble” (Japón); dicha actividad ha sido premiada en el 2014 con la medalla de bronce por parte de la fundación “Andrés Segovia”.
Ha sido invitado a los festivales de música clásica como el de Tur (Francia) de música contemporánea de Zagreb, así como de París, de Colmar, Praga, San Sebastián, etc…
Es miembro fundador junto con Ara Malikian, del festival internacional de verano “Caprichos Musicales de Comillas”, un proyecto que inició en la Villa de Comillas en el 2003 y desde entonces ha gozado de un éxito internacional y del reconocimiento por parte del Ministerio de Cultura del Gobierno de España, que les apoya económicamente. En agradecimiento a su gran labor desarrollada durante diez años, Serguei Mesropian ha recibido una placa conmemorativa del Ayuntamiento y del Pueblo de Comillas, aprovechando el décimo aniversario de dicho festival.
También es director y fundador junto con el guitarrista Telmo Fernández y Ara Malikian, del festival de música clásica “Marqués de Santillana” en Buitrago de Lozoya desde el 2008 hasta ahora. Cabe destacar la participación en otro proyecto que se denomina “Bach to the Universe”, creado por el Doctor en astrofísica y músico Telmo Fernández, en el que la música se presenta como un viaje a través del espacio y tiempo; en el que protagonizan el violinista Ara Malikian, nuestro entrevistado, el guitarrista Telmo Fernández y las proyecciones de Agencia Espacial Europea. Con este proyecto estos artistas han actuado en toda la península española y fuera de España, como en Japón, Qatar, etc…
Aparte de su actividad como concertista desarrolla una laboriosa labor como docente, colaborando habitualmente en ciclos de clases magistrales en España y otros países: “Nueva Generación Musical” Madrid, “Manuel Quiroga” Lucena, “Chamber Music in Italy” de Isquia, en Lisboa, San Petersburgo, Ereván, Tiblisi. Desde el año 2000, incluso ha sido invitado para impartir clases magistrales en los Ciclos Universitarios de los Cursos de verano de Nueva York.
Serguei Mesropian es profesor de violonchelo y música de cámara de Grado Superior y Postgrado en CSKG, es director de la orquesta de “Enseñanza Musical Katarina Gurska” en Madrid, profesor de violonchelo y música cámara en la Escuela Superior “Música Creativa” en Madrid, y durante los años 2010 – 2012 ha sido profesor en la Escuela Superior y Postgrado de música UEH de Moscú M. A. Sholojov. El éxito de muchos de sus alumnos que han sido ganadores en numerosos concursos nacionales e internacionales, avalan la excelente labor que desempeña como maestro y de sus conocimientos pedagógicos.
Sin más preámbulos, daremos comienzo a la presente entrevista con este genial músico y persona que es Serguei Mesropian, a pesar de su apretadísima agenda como intérprete y profesor. Apreciado y admirado por sus compañeros de profesión y querido por los alumnos que han aprendiendo de él a lo largo de todos estos años.
-Lo primero, Serguei Mesropian, quiero agradecerte el tiempo que nos dispensas dentro de tu apretada agenda, a la hora de responder a las siguientes preguntas que verán la luz en el periódico sociocultural Granada Costa. Mi primera pregunta como es ya una tradición, ¿a qué edad y cómo te nació la pasión por la música?
-La música estaba en casa, era algo natural para mi familia… lo raro habría sido que no hubiera estado allí.
-Cuando tus padres supieron que querías dedicarte al mundo de la música, ¿te apoyaron de forma incondicional, o tenían las reservas típicas de los padres, esperando que estudiaras una profesión con más estabilidad y seguridad económica?
-En realidad, fueron mis padres, sobretodo mi padre, contrabajista de la orquesta sinfónica de Tiblisi, el que me metió directamente en una escuela de música para niños con aptitudes especiales.
-Eres de origen armenio, pero llevas viviendo en España, ya ni se sabe. ¿Qué nos puedes contar de tus padres, y qué te enamoro de nuestro país y su gente, para que terminases viviendo aquí, y darnos tanto de tu saber y arte?
-Mi padre Gevork fue soldado durante la Segunda Guerra Mundial, sobrevivió de milagro en los diferentes campos de concentración de Alemania en los que estuvo cuando le capturaron. Al acabar la guerra, se instaló en Tiblisi, y ya que aún era joven, se concentró en la música, llegó a ser muy buen contrabajista. Allí conoció a mi madre, Ekaterina, que era profesora de lengua. Vivimos en Georgia hasta mi adolescencia más o menos y ya después nos mudamos a Ereván, Armenia.
Ya trabajando en diferentes orquestas de Ereván y San Petersburgo, hice varias giras por España, y me quedé prendado de este país, que en realidad me hacía sentir como en casa, por la calidez de las personas, el clima, la comida… Coincidió en un momento difícil por el que pasaba Armenia, que me invitaron de nuevo para trabajar en España, así que fue el momento en el que sentí que debía de cambiar de lugar y comenzar un nuevo capítulo profesional y personal junto a mi familia.
-Entre tantos instrumentos existentes en Orquestas y Bandas, ¿qué te llamo la atención especialmente de un instrumento como el violonchelo, para darle tu pasión y tus cuidados constantes, para extraer de él todo lo que puede expresarnos?
-De nuevo, fue mi padre, decidió por mí. El paso del tiempo ha ido reafirmando su decisión, ¡fue la mejor elección!
-Has recibido clases de numerosos maestros y profesores de enorme nivel y fama, ¿qué nos puedes contar de esos tiempos y qué maestros te marcaron más por su forma de enseñar y de mostrarte el camino a seguir, para alcanzar la cima en la que te encuentras?
-Sin duda mi maestro Talayán, fue mi mentor en muchos aspectos de la vida. Y naturalmente Rostropovich. Estas dos personas me marcaron mucho. Además, la amistad tan fuerte que les unía hacía que fuera toda una experiencia el estar con ellos, en su presencia, compartir el tiempo… era un todo, no eran unas simples clases de violonchelo.
-A lo largo de tu trayectoria has tocado en numerosas salas de concierto y auditorios, de todos esos países y lugares, ¿cuáles te han impresionado más por la majestuosidad del entorno y su acústica o por el recibimiento de su público?
-Es difícil responder, cada sala tiene su esencia y guardo muy buenos recuerdos de casi todas. Quizás acústicamente, en Japón las salas son perfectas, pero humanamente y por su entorno, me quedo con los lugares y el público de los conciertos que he dado por Europa, y sobretodo por España.
-Con Ara Malikian, has formado a lo largo de tantos años una enorme amistad imagino, pues con él y Telmo Fernández, os habéis embarcado en diferentes proyectos de índole internacional, como el festival “Caprichos Musicales de Comillas” y el “Marques de Santillana”. ¿Cómo surgieron esos festivales y qué han significado en la vida de Serguei Mesropian?
-Esos festivales son frutos de la amistad, qué mejor cosa en el mundo que hacer música con buenos amigos. La forma de hacer música y el resultado es totalmente diferente y naturalmente que el público lo nota y lo agradece…
-También formaste parte de un proyecto denominado “Bach to the Universe” que creó Telmo Fernández, que es músico y astrofísico. Junto a Ara Malikian y Telmo Fernández, distéis una gira por toda la península ibérica, Japón, Qatar y otros países. ¿Qué nos puedes contar de ese proyecto que mezclaba la música con el espacio y el tiempo, para los que no pudieron asistir a veros?
-Fue un proyecto absolutamente revolucionario y muy bonito, creo que Telmo fue un pionero en este tipo de concepto de fusión de la ciencia y la música. La música es espacio y tiempo, es física aplicada, he ahí que el proyecto fluyera de manera natural y aunque fuera un concepto nuevo de concierto, cuadraba perfectamente como si se hubiera hecho de siempre.
-A lo largo de todos estos años, además de músico ejerces de profesor, tanto impartiendo clases como colaborando en clases magistrales. Imagino que algo se aprenderá de ellos, al igual que ellos de ti, pues algunos han ganado numerosos premios nacionales e internacionales. ¿Qué se siente dando clase y verles ganar premios donde en cierto modo, parte de ese logro viene de que han sabido aprovechar tus enseñanzas?
-Naturalmente es una felicidad ver el fruto de tu trabajo reflejado en los alumnos, que estén en un escenario, que triunfen, que crezcan y sigan las enseñanzas de uno… Es todo un honor.
Cada alumno es un mundo, he ido aprendiendo mucho de cada uno de ellos a lo largo de los años.
-Según veo has recorrido casi todo Japón, tanto como intérprete e impartiendo clases magistrales. Siendo un continente tan apartado de la música clásica europea, tengo oído que son excelentes oyentes y amantes del conocimiento cultural de otros lugares, e incluso algunos músicos de allí son formidables intérpretes de la música occidental, hasta el punto de ser conocidos mundialmente. ¿Qué nos puedes contar de aquella aventura por Japón y qué recuerdos guardas de sus auditorios y de su público?
-Son muy disciplinados y eso hace que sean formidables en todo lo que se proponen, profesan un gran respeto y amor hacia la música. Desde la primera vez que estuve en Japón, hice grandes amigos, su respeto y admiración son abrumadores. Les he invitado a actuar y traer su cultura a España. Y en el mes de diciembre de nuevo estaré allí, actuando con ellos en varias ciudades.
-De todas las obras magistrales que has tenido que interpretar de todos esos genios de la historia de la música, ¿qué compositor te ha resultado más cercano y, qué obra en especial te ha resultado la más extenuante y compleja a la que hayas tenido que hacer frente?
-Una de mis obras preferidas es la sonata para cello de Prokofiev, y por nombrar algunas que fueron un reto, la sinfonía concertante de Prokofiev, las variaciones sobre un tema rococó de Chaikovsky o la sonata Arpeggione de Schubert.
-A lo largo y ancho de la historia de la música clásica, han existido momentos e instantes memorables que han marcado el devenir de la cultura del pentagrama clásico. En el caso de Serguei Mesropian, ¿a cuál de ellos le gustaría asistir en primera persona como público o interprete, para sentir y vivir lo qué allí sucedió?
-Me habría gustado vivir en la época de Bach y haberle servido como músico en el proceso creativo de las suites para violonchelo, haber vivido en esos años en los que el violonchelo evolucionó tanto… luego volver y enseñar lo aprendido a mis alumnos.
-Sabemos que todos los artistas tienen manías o supersticiones a la hora de salir al escenario. En el caso de Serguei Mesropian ¿existe alguna que pueda ser confesable, sin temor a ruborizarse por ello?
-Creo que no tengo manías en concreto para eso, soy maniático en general en cualquier momento…
-Para concluir, ¿existe alguna pregunta que te gustaría haber respondido pero que no has tenido la oportunidad de hacerlo?
-No, creo que son las preguntas más originales que se me han hecho nunca, muchas gracias Ricardo.
Sin más, quiero agradecerte Serguei Mesropian el tiempo que nos has dispensado para darte a conocer a los lectores del Granada Costa, a pesar de esa apretada agenda que tienes. Como último esfuerzo espero tengas a bien el responder a unas preguntas tipo test, que nos hará conocerte algo mejor, en lo que son preferencias culturales y gustos personales, que hacen las delicias de los lectores y da quebraderos de cabeza a los entrevistados.
¡Muchas gracias, Serguei! Te deseo todo lo mejor para tus próximos proyectos musicales, tanto como intérprete o siendo la batuta de la enseñanza de futuros músicos.
PREGUNTAS TIPO TEST:
¿Un personaje histórico? Mesrop Mashtots.
¿Una época? La actual.
¿Un pintor? El Bosco.
¿Un escultor? Auguste Rodin.
¿Un escritor? Hermann Hesse.
¿Un poeta? Heinrich Heine.
¿Un libro? El juego de los abalorios.
¿Una película? Nostalghia.
¿Un director de cine, teatro o televisión? AndréiTarkovsky.
¿Un actor? Charlie Chaplin.
¿Una actriz? Hedy Lamarr.
¿Un compositor? Johann Sebastian Bach.
¿Un cantante? Feodor Chaliapin.
¿Un músico? Glenn Gould.
¿Una flor? La rosa roja.
¿Un animal? El perro.
¿Una estación del año? El otoño.
¿Un lugar donde residir? España.
¿Un lugar que te gustaría visitar antes de morir? Un lugar donde no haya guerra.
¿Un color? Los semi-matices de los paisajes otoñales.