ENTREGA DE LOS PREMIOS DE FOTOGRAFÍA 4th BALEARIC ISLANDS DIGITAL PHOTO CIRCUIT 2017
Un año más –y van 19–, el pasado día 9 de septiembre, se hizo entrega de los premios de fotografía que organiza 4th Balearic Islands Digital Photo Circuit 2017 y, un año más, los muchos asistentes al acto hemos quedado encantados, ya que todas las fotografías eran de una calidad extraordinaria (pienso en el gran trabajo y responsabilidad de las personas que debían elegir las mejores fotografías para conceder los premios). La participación ha sido extraordinaria, proveniente de gran parte del mundo, lo que reafirma el prestigio de dicho concurso, así como la preparación y sensibilidad de los convocantes.
Como en años anteriores, el acto de entrega se celebró en el gran edificio de la Misericordia, perteneciente al Consell Insular de Mallorca, concretamente en una sala con buena acústica y elementos de piedra de maret visto, que daban una sensación de elegancia y rusticidad.
Abrió el acto José Tamayo, presidente del Grup Fotografic Digital de les Illes Balears, que leyó dos actas del jurado con los nombres de los premiados, y se entregaron algunos de los muchos premios concedidos a los participantes o encargados de recogerlos, que fueron muy aplaudidos.
La tercera acta del jurado fue leída por el presidente del Col.llectiu Fotografic F22, Juan Palmer, que fue llamando a recoger su premio a algunos de los premiados que se encontraban en la sala.
El resultado de los tres máximos premios ha sido el siguiente: Medalla de Oro FIAP a Andreu Noguero Cazorla, de España. Medalla de Oro FIAP a Sergey Anisimov, de Rusia. Medalla de Oro FIAP a Txema Lacunza Nestera, de España.
Esta decimonovena convocatoria está compuesta por los siguientes salones:
Salón 1 «XIX CERTAMEN FOTOGRÁFICO INTERNACIONAL MALLORCA 2017».
Salón 2 «XII SALÓN INTERNACIONAL DE FOTOGRAFÍA DIGITAL ILLES BALERARS 2017».
Salón 3 «V SALÓN FOTOGRÁFICO DIGITAL ILLA DE MENORCA 2017».
Este circuito internacional de fotografía goza del patrocinio de las siguientes instituciones: FIAP –Fédération Internationale de l´Art Photographique–, PSA –Photographic Society of America–, GPU –Global Photographic Union–, CEF –Confederación Española de Fotografía–, ISF –Image Sans Frontiere–.
El acto estuvo presidido por Juan Palmer, presidente del Coll.llectiu Fotografic F22, y José Tamayo, presidente del Grup Fotografic Digital de les Illes Balears.
Se presentaron 253 autores de 44 países diferentes con un total de 2868 fotografías, todas ellas de gran nivel. Los países participantes fueron: Andorra, Australia, Austria, Baréin, Bangladesh, Bélgica, Canadá, China, Dinamarca, Egipto, Inglaterra, Finlandia, Francia, Alemania, Grecia, Hong Kong, Hungría, India, Indonesia, Irlanda, Israel, Italia, Kuwait, Lituania, Nueva Zelanda, Noruega, Omán, Portugal, Catar, Rumanía, Rusia, Singapur, España, Sri Lanka, Suiza, Taiwán, Tailandia, Turquía, Ucrania, Estados Unidos, Vietnam y Gales.
Se concedieron 83 premios en cada uno de los tres salones, es decir, un total de 249 premios. Dicho circuito constaba de tres temas: MONOCROMO, COLOR Y PHOTO TRAVEL.
Una vez que se hubieron entregado los premios, se hizo un pase amplio de fotografías, cada cual más espectacular. Es difícil poder decir –a ojo de alguien poco entendido en esta materia– cuál era mejor o peor, para mí todas eran hermosas. Todas tenían reflejado el espíritu de su autor, la sensibilidad mágica de su cámara y la percepción por las cosas bellas. Todas las fotografías contenían un mensaje que había que entender. Desde la grandiosas llanuras y bosques helados de Rusia hasta las imágenes desgarradoras y tristes de los suburbios de la India, o las espectaculares de las aves de rapiña, o el contraste, la magia y la serenidad de las aves migratorias; y por qué no mencionar las fotografías de los desnudos de mujeres con sus cuerpos frescos, tentadores y sus pechos núbiles, o de los niños, tanto de la India como de China, con sus ojos de asombro e interrogación ante un porvenir nada halagüeño, o de los ancianos en cuclillas, con caras arrugadas y sin poder determinar una fecha, pues para ellos ya no hay futuro, pues su presente es incierto y el pasado solamente habrá sido penuria y hambre; en cuclillas esperando no se sabe qué, quizás a que pasara la tarde, o esperando a que el Dios de la lluvia llenara de frescor su marchita y arrugada piel. O la foto de las flores, como los lirios, temblando, mientras por sus anchas hojas se deslizan con fondo de música las gotas de lluvia que sobre ellos hace caer la niebla que se extiende por todo el valle; o la foto de la niña toda arropada de pieles con sus ojos penetrantes e interrogadores, ante los cuales solamente existe una vasta llanura infinita y nevada de la estepa de Rusia, mientras a su espalda un cachorro de raza desconocida, que más que perro parece una madeja de lana, se protege detrás de quien debe ser protegido.
En fin, una tarde mágica y entretenida que, entre otras cosas, nos sirvió para aprender y conocer paisajes remotos, todos ellos maravillosos y que nunca podremos contemplar. Fue una tarde cultural de altos vuelos…
Asistieron entre otros: María Dolores Alabarces Villa, Jesús Lozano, Lucía Caparrós, Hortensia Rioja de Carlos, Paqui Cano, Joan Marc, Fernanda Llabrés, Juana María Pol, Juan Bellido, Juan Ramón y Virginia, Asunción Bibiloni, Antonia Amorós, Juan Imberbon, José Nª Serrano, Tolo Guerrero, Pilar Ruano, Concepción Alarcón, Juan Antonio Alarcón, Miquel Riutort, Ángel Cobo, Antonio Orvais y Gracia Vázquez, Carlos Tamayo, Elisa Garrote, Emma Tamayo, Maite Garrote, Sara y Paula Mellado, etc.
Una tarde repleta de cultura y agradable compañía, que finalizó con un espléndido ágape de exquisitos productos mallorquines.
Marcelino Arellano Alabarces