El Milagro de Empel

El milagro de Empel, de Augusto Ferrer-Dalmau

Para entender el milagro de Empel es necesario conocer de antemano su marco histórico, así que comencemos por ahí:

Acabábamos de tomar Amberes, sin duda una gran victoria para nuestro ejército español que tenía la moral muy elevada para enfrentarse a Inglaterra, nuestro gran enemigo.

En ésta historia aparecen dos grandes generales, por un lado Alejandro Farnesio (Amigo y mano de derecha de Felipe II), un maravilloso estratega y general. Y por otro Francisco Arias de Bobadilla general del Tercio Castellano que se formó en la ciudad de Zamora para la guerra de sucesión de Portugal.

            Estamos en 1585, Felipe II está pensando en invadir las Islas Británicas. La intención era ocupar Holanda y Zelanda por dos claros motivos: era el corazón de la rebelión y porque necesitábamos la costa para la invasión.

            Aquí entra en juego la capacidad de estrategia de Alejandro Farnesio que sabe que para conquistar ambas ciudades necesita un punto en concreto que sirva como logística, pues las ciudades de Holanda y Zelanda eran territorios totalmente inundados, cuyas tierras no producían alimento alguno. Para ello piensa en Bolduque, éste pueblo que estaba en la frontera se encontraba entonces pidiendo ayuda a España porque estaban totalmente desabastecidos y olvidados.

Farnesio aprovecha esta debilidad porque sabe que si los ayuda, los pueblos de los alrededores verán que se puede volver a confiar en España y es una manera de que nos apoyen en la guerra que se avecinaba. Pero además Bolduque era el sitio perfecto para crear allí el punto logístico tan necesario para poder invadir las Islas Británicas.

            Farnesio va directo a Bolduque pasando por un terreno entre el río Mosa y Wall, Bommel, un terreno de no más de 20 km por 7 rodeada por dos ríos muy caudalosos, un terreno muy próspero para el trigo, el heno y además fácil de llegar con los barcos, por lo tanto, la vía marítima era perfecta.

            El Tercio de Bobadilla que había acudido a la llamada de Farnesio, se encontraba en Huelva en esos momentos y pusieron rumbo a Bommel, unos 1300 km les separaban de lo que más tarde sería para el resto de la historia: “Uno de los más grandes momentos para el recuerdo en la Historia de España”

            Cuando el Tercio Español llega al lugar para entrar, rompen los diques, las compuertas e inundan esta tierra (Se dice también que fue el enemigo quien abrió estas compuertas). Visto todo el destrozo ocasionado, no les queda más remedio que replegarse y poner rumbo a otro lugar.

Justo en Empel los Tercios Españoles se ven rodeados de agua, atrapados y sin salida pues el enemigo con sus barcos estaba acechándolos. Consiguieron pedir ayuda al General Farnesioy éste les mandó veinte navíos para sacarlos de allí en la oscuridad de la noche, pero los espías enemigos los localizaron y prendieron fuego. Mientras tanto los soldados que llevaban sobreviviendo unos cinco días comienzan a abastecerse con el único alimento que pueden, sus caballos. (Los cuadros de Augusto Ferrer Dalmau son verdaderas obras de arte las cuales aconsejo ver para sentir este episodio). Además, el ejército para protegerse de los ataques del enemigo, solo podían cavar agujeros para ello.

            La tarde del sábado día 7 es cuando uno de los hombres encuentra la tabla, con la imagen de la Inmaculada Concepción, que se la entrega a Alejandro Farnesio y éste, fiel devoto, hombre religioso (Al igual que su Rey, Felipe II) y hombre creyente de milagros, mostró la tabla a sus hombres dando un giro a la moral de éstos que vieron en éste hecho una llamada divina. Fueron a colocarla en la ermita y comenzaron a rezar y en esos momentos ocurrió el milagro: “Las temperaturas bajaron hasta llegar a los 22º bajo cero haciendo que toda el agua que los tenía rodeados se convirtiese en una gran capa de hielo”.

            Los barcos del enemigo, quedaron atrapados, los Tercios Españoles podían por fin atacar sin piedad.

            Al siguiente día, un domingo día 8, los soldados salen rezando de la ermita con la tabla abriendo paso, es entonces cuando “comienza a llover y el hielo que los rodeaba va derritiéndose poco a poco”

«Tal parece que Dios es español al obrar tan grande milagro». almirante Hohenlohe-Neuenstein

            “Esta historia siempre ha sido punto de controversias y conflictos entre los Españoles, para variar. Sea como fuere, la verdad es que una vez más se nos presenta ante nuestros ojos la oportunidad de estar orgullosos de nuestro pasado y nuestra historia. La Historia de España”