Dra. Toñy Castillo

“El medio es el mensaje”, es una frase que corresponde a McLuhan, sociólogo de nacionalidad canadiense, el cual, mediante sus trabajos, exponía ya en el año 1964 que las tecnologías actuaban como prolongaciones del ser humano desde ámbitos tales, como los sentidos o las capacidades psíquicas, emocionales…

Todos y todas sentimos la necesidad de comunicar. La comunicación es una de las características que nos definen como seres humanos donde la interacción y la extrapolación de la información que deseamos trasmitir y compartir forma parte de la misma esencia del ser.

Las ciencias de la comunicación están incluidas dentro de las ciencias sociales y como tal, están siempre en evolución y mutabilidad derivada de los cambios que se producen en el seno de sociedades en un mundo caracterizado por la globalización. Si centramos el tema en la comunicación, los cambios tecnológicos han producido un abordaje estructural tan amplio que dificulta los límites del objeto de estudio al situarnos delante de la denominada comunicación de masa.

Basaremos la importancia de la comunicación como hecho fundamental de la interrelación social y como esta se desarrolla nuevos parámetros para adecuarse a nuevos escenarios sociales saludables.

En los años 50 el antropólogo inglés Radcliffe Browm hablaba de que los seres humanos estábamos conectados por una especie de red creadora de relaciones. Nos ponía en situación de observar el fenómeno de la comunicación que se daba entre dos personas bajo la existencia de redes más amplias. Si esta afirmación hubiese sido realizada en el año 2000 seguramente estaríamos a un paso de afirmar que el autor estaría hablando de Internet. Y es

ue internet, encaja casi a la perfección con el modelo social de comunicación que se utiliza al desarrollar la teoría de redes sociales.

Estamos en este siglo XXI delante de una nueva realidad social que resulta de la interacción compleja entre la evolución social y la evolución tecnológica con internet como medio de comunicación interactivo y como infraestructura indispensable de la organización en un conjunto de transformaciones, no solo económica, sino social, lo que conlleva a tipos diversos y globales de comunicación y redes interactivas.

Al hablar de las Tecnologías de la información y la comunicación la primera representación mental es un ordenador o un teléfono móvil por el cual somos capaces de comunicarnos: bien entre un emisor o receptor o entre emisores y recetores múltiples, por tanto, el nuevo paradigma comunicativo abarcaría una gran diversidad de usos telemáticos que claramente tienen y mantienen propósitos distintos y consecuentemente pueden tener niveles de impacto coherentes con su funcionalidad.

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