EL CALVARIO BOM JESUS DO MONTE (BRAGA)

            Francelina Robin

En Bom Jesus do Monte, se encuentra el funicular más antiguo del mundo, con interminables escalinatas, fuentes y estatuas barrocas, rodeado de un manto de vegetación con más de cien años, del cual tenemos información desde el siglo XIV. Bom Jesus do Monte o, también llamado, Bom Jesus de Braga, se trata de uno de los destinos más visitados en la zona de Braga, es de los más concurridos tanto por locales como visitantes extranjeros. En 1373 ya había indicios de actividad y construcción de una Capilla en Bom Jesus do Monte, aunque con poca afluencia y poca importancia. La segunda Capilla llegó mucho más tarde, en 1494. Sin embargo, el Bom Jesus do Monte tal como lo conocemos hoy, aparece en 1722 cuando, por iniciativa de Don Rodrigo de Moura Teles, se inicia el proyecto del Santuario actual, con la construcción de la Vía Sacra, el pórtico y las escaleras de las Capillas de los Cinco Sentidos. En 1784, con el aumento de peregrinos, el arzobispo Don Gaspar de Bragança encargó a Carlos Amarante la tarea de diseñar una nueva basílica, que fue finalizada en el año 1811 y que era el reemplazo a la iglesia anterior que estaba en ruinas. En el extremo inferior de la escalera del Pórtico hay un arco de 7 metros de alto y 4 metros de ancho y la escalera continúa, rodeada de una fuerte vegetación, a lo largo de 376 escalones hasta la plaza que precede a la siguiente escalera de Cinco Sentidos.

El cenáculo, el jardín, la prisión, las tinieblas, los azotes, la coronación, el Calvario, la caída y la crucifixión, son algunas de las etapas de la Cruz que se representan en las capillas durante la ascensión. Se trata de un recorrido muy bonito que sobre todo, para los creyentes, es muy significativo. Yo lo recorrí cuando era joven, tenía bastante miedo, y aunque el miedo me limitaba, por aquel entonces tenía buenas piernas para subir a pie, hoy no lo podría hacer de ninguna manera, pues se trata, como les comento, de una sucesión de escalinatas para las que hay que estar en forma.

            En cuanto a la escalera de los Cinco Sentidos comienza junto a la Fonte das Cinco Chagas o Fonte das Cinco Correntes y desde allí, en cada tramo de escalera, hay una fuente correspondiente a uno de los sentidos humanos. Una estatua que expulsa agua por los ojos que representa la visión, por los oídos, que representa el oído, por la nariz, el olfato, por la boca, el gusto y, finalmente, una estatua con ambas manos sosteniendo un cántaro que vierte agua y que simboliza el tacto. Es muy hermoso, pero a la vez muy agotador. La escalera empieza desde un atrio cuadrado, una curiosidad de dicha escalera es que no estaba incluida en las ideas iniciales de los planos de Don Rodrigo de Moura Teles. Fue diseñada con posterioridad por Carlos Amarante al mismo tiempo que la basílica. Es por ello que se pueden apreciar diferencias entre estas escaleras y el resto, ya que estas tienen un estilo neoclásico y el resto un estilo barroco. Aquí puedes encontrar fuentes que hacen referencia a las Virtudes Fe, Esperanza y Caridad que son necesarias para entrar al Templo.

La última vez que estuve allí la escalera aún no se había terminado. Yo me encontraba en Largo do Pelicano y, aunque todavía no habíamos llegado al cementerio, desde allí pudimos admirar el precioso jardín barroco que por sí solo merecería una visita a Braga. El Largo do Pelicano, antes conocido como Terreiro de Moisés, se encuentra en el sitio donde antes se ubicaba la Capilla Elipsoidal, construida por Don Rodrigo Moura de Teles, antes de la construcción de la basílica actual. El Adro es el lugar donde se encuentra la famosa basílica y, probablemente, el punto y final de quienes aceptan el gran reto de subir los 573 escalones de la larga escalera.

            Aquí podemos un conjunto de estatuas que representan personajes bíblicos vinculados a la Pasión de Cristo. Como les digo, el diseño presenta líneas simples y superficies lisas, en línea con el estilo neoclásico. El Vía Crucis está representado en todo el Santuario de Bom Jesus do Monte con un total de  17 capillas repartidas por las escaleras, Largo do Pelicano, el cementerio y el Terreiro dos Evangelistas. Sin embargo, sólo dos de las capillas forman parte del conjunto original. El resto fueron reconstruidos posteriormente.

            Por una cuestión de adaptación, se construyó un ascensor o funicular que facilita el ascenso, es una buena alternativa si no tienes intención de subir los cientos de escalones de la escalera de Bom Jesus. Es una manera más cómoda de superar este reto y de que este impedimento no te deje sin ver este rincón tan hermoso. Dicho funicular, más conocido como Elevador Bom Jesus, fue diseñado por Niklaus Riggenbach e inaugurado en 1882. Es único en la Península Ibérica y el más antiguo del mundo que sigue estando activo. Su funcionamiento convierte a la obra realizada por el ingeniero portugués Raul Mesnier du Ponsard en uno de los ejemplos más extraordinarios de ingeniería en Portugal. Tiene una curiosa forma de funcionar, el funicular es movido por agua, como contrapeso. Es de lo más curioso, puesto que dos cabañas, ambas con tanques de agua, están conectadas por un cable. Cuando una cabina está en la parte superior, el tanque de esa cabina se llena con agua, cuyo volumen depende del número de pasajeros mientras que el tanque de la cabina inferior se vacía. Esta acción hace que la cabina superior sea más pesada y, cuando el conductor suelta los frenos, la diferencia de peso hace que la cabina inferior se eleve. ¡Todo un arte! En cuanto al Terreiro dos Evangelistas es donde se encuentran las tres últimas capillas de la Via-Sacra, relacionadas con la aparición de Jesucristo a María Magdalena, la Casa de Emaús y la Ascensión. El Terreiro se inauguró entre los años 1750 y 1760, tiene planta octogonal, una fuente en el centro y las estatuas de los cuatro evangelistas: Mateo, Marcos, Lucas y Juan. Por lo que respecta a la estatua de São Longuinho, es importante porque está ubicada sobre un pedestal. São Longuinho fue uno de los soldados presentes en la crucifixión de Jesucristo y que acabó convirtiéndose en santo. Hay una Leyenda de São Longuinho de Braga que involucra una historia de amor.

            No se pierdan el paseo por Braga por los jardines y lagos de Bom Jesus do Monte. Si todavía no tiene claro si  Bom Jesus de Braga merece una visita obligada, los jardines y el lago eliminarán cualquier posible duda y les aseguro que no se arrepentirán. Cuevas, senderos desconocidos, quioscos de música y lagos hacen que este parque se convierta en espacio único para disfrutar en familia o amigos. Y si tienen alguna duda les diré que, en julio de 2019, el Santuario de Bom Jesus fue clasificado como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO. Esta decisión significa que Portugal ahora tiene 17 bienes materiales clasificados como Patrimonio Mundial por la UNESCO, además de los 11 que constituyen patrimonio mundial de origen portugués en el mundo. Es un lugar maravilloso, tiene una vista sensacional y una linda iglesia. Se trata de un lugar muy bonito, les invito a dar un paseo por Braga, ver Bon Jesus do Monte y enriquecerse de su gastronomía. No dejen de probar el caldo verde, bacalao y un sinfín de platos que no podrán olvidar. Dado mi origen portugués, me ilusiona acercarles parte de la historia del que fui mi país de nacimiento y por el que siento un amor especial.

BRAGA SEÑOR DEL MONTE

Después de describir los lugares

recorridos fuera del país,

por fin, me dedico de nuevo

a los caminos que tomé

por mi estimado Portugal.

Como ya les conté anteriormente,

recorrer cada rincón de Portugal

siempre fue una prioridad,

cuando tuve oportunidad.

Visité parte del patrimonio

cultural y religios. En cada visita

confirmo que este país

está lleno de rincones

que seducen a los visitantes.

Fueron varios los lugares

que recorrí y que todavía

no tuve oportunidad

de compartir con ustedes,

así que retomaré la costumbre

de contarles las visitas realizadas

 por mi país de procedencia.

Uno de los lugares imperdibles

es la ciudad de Braga.

Braga se encuentra en el corazón

de la verde región de Minho,

en el noroeste de Portugal,

rodeado por un magnifico paisaje.

La ciudad, una de los más grandes

centros religiosos de Portugal,

es reconocida por sus iglesias

barrocas, por el espléndido

solares del siglo XVIII

y bellos parques y jardines.

Decíamos, sonriendo, cuando éramos

jóvenes, que habíamos visto Braga

por un canuto, ¡era cierto!

Mentíamos un escudo

y veíamos la ciudad de Braga entera.

Esta gran ciudad era conocida

en tiempos de los romanos.