DIARIO DE UN POETA EL DÍA QUE CONOCÍ AL POETA Y ESCRITOR JORGE LUIS BORGES
Qué duda cabe que, Jorge Luis Borges, es uno de los escritores y poetas más importantes y conocidos del siglo XX. Su poesía ha transcendido, no solamente en el mundo de habla española, sino en el resto del mundo. Jorge Luis, incursionó en todos los estilos literarios. (Poesía, novela, ensayo, traducciones…)
Es verdad que, toda Hispanoamérica, ha venido dando, en el siglo XX, grandes intelectuales, la relación sería interminable, esos grandes intelectuales -en este caso Jorge Luis- han brillado con luz propia en la constelación de las letras universales. Es precisamente de la América de habla española, -no me duele decirlo- de donde han salido los más grandes poetas y escritores, durante la mayor parte del siglo XX. Es sorprendente, la gran capacidad que tienen nuestros hermanos latinos, para crear, maravillosamente, grandes obras literarias. Son verdaderos especialistas en todos los campos literarios. Sus textos han traspasado las fronteras y son conocidos en todo el orbe. Quién no ha leído alguna vez, poemas de Juana de Ibarbourou, Alfonsina Storni, Gabriela Mistral, Pablo Neruda, José Asunción Silva, Amado Nervo, Octavio Paz, Rubén Darío, José Ángel Buesa, etc. Y en prosa: Augusto Roa Bastos, Mario Vargas Llosa, Julio Cortázar, Juan Rulfo, Gabriel García Márquez, Miguel Ángel Asturias, José Lezama Lima, Mario Benedetti, etc.
Las Islas Baleares, especialmente Mallorca, han sido siempre una tierra muy propicia, para la llegada de grandes intelectuales, provenientes de todo el mundo y, como no podía ser menos, Jorge Luis Borges visitó la Isla en diferentes ocasiones, la primera vez fue en el año 1919.
Obtuvo entre otros grandes premios, el prestigioso premio Formentor. Durante más de treinta años, fue candidato al Premio Novel, que nunca consiguió, ya que, a la hora de obtenerlo, influyen mucho las ideas políticas. Solamente, basta saber quiénes lo han obtenido durante el siglo XX. Sí, obtuvo entre otros muchos, el Premio Nacional de Literatura argentino.
Le gustaba mucho viajar, desde joven ha realizado infinidad de viajes hasta su fallecimiento, ocurrido en Suiza en 1986. Nació en 1899, en Buenos Aires.
Recuerdo, en estos momentos, que hace ya unos diez años, participé en un coloquio de Radio Nacional, con tres personas más, una de ellas era el periodista y escritor peruano, afincado en Mallorca, Carlos Meneses (Coco Meneses). Entre otros temas, se habló precisamente sobre la influencia de los poetas y escritores hispano americanos, yo defendí que, el futuro del idioma español, estaba en América latina, debido a su gran población. Uno de los tertulianos no estuvo de acuerdo conmigo, y tras unas palabras de controversia, siguió la tertulia. ¿Estaba en lo cierto?
Posiblemente, cuando yo conocí a Jorge Luis Borges, sería su último viaje a Mallorca. Era una tarde soleada de los últimos días del mes de mayo. Esa tarde iba yo paseando por las Ramblas de Palma hacia el paseo del Borne, cuando a la altura de la Plaza Weyler, fijé mi atención en la pareja que iba delante de mí y rápidamente pude ver que, se trataba nada menos, de Jorge Luis Borges, acompañado de su esposa y lazarillo María Kodama, que lo era todo para el genial maestro de las letras, su esposa, su secretaria y sus ojos. Me adelanté a ellos unos pasos, para asegurarme de quien se trataba y sin más me giré y le dije: << Maestro, es para mí un honor poder saludarle>>. La pareja, sorprendida, se paró y yo continué diciendo: <<Escribo poesía, me gustaría invitarle a tomar un refresco y poder hablar con usted>>. Me observó en silencio y tras comentar algo con su esposa me dijo: <<Había por aquí un bar, que conservaba las mesas de mármol como antiguamente>>. Le contesté: <<Existe ese bar, maestro, con las mesas antiguas, su propietaria actual es la actriz austriaca Cristine Kaufmann>>. Me dijo: <<Está bien tomaremos un café>>. Afortunadamente, encontramos una mesa libre, nos sentamos y pedimos un café, María Kodama tomó un zumo de fruta. Me preguntó si llevaba en ese momento algún poema mío, le dije que sí, me pidió que se lo leyese. Después de escucharlo muy atentamente, me dijo que estaba bien, pero que debía cambiar dos versos de la parte central del poema. María, me miró sonriendo y tras consultar con Jorge Luis, me indicó los versos que debía corregir. Me hicieron algunas preguntas en relación a la actualidad literaria de la Isla. Le comenté que había fundado una revista literaria, se sorprendió mucho. Me felicitó diciéndome: <<Te felicito Marcelino, eres valiente al crear una revista literaria con los tiempos que corren>>. Quizás no me podía ver bien, pero sentía que me miraba con los ojos de su alma. Después de un tiempo y tras apretar su mano, me deseó suerte en mi cometido. María, dentro de su acusada seriedad, me dirigió una amplia sonrisa y me agradeció la invitación.
Los vi alejarse calle abajo, perdiéndose entre la mucha gente que a esa hora caminaban por ella, iba cogido del brazo de su esposa y en la otra mano sostenía su eterno e inseparable bastón. Durante unos minutos no me moví del lugar, hasta que sentí que el camarero retiraba las tazas, lo miré y sonreí para mí. Era feliz, pues, esa tarde, conocí personalmente y estuve tomando un café con ese gran genio de las letras, que nunca olvidaré.
Marcelino Arellano Alabarces
Palma de Mallorca