DIARIO DE UN POETA EL DÍA QUE CONOCÍ A BALTASAR PORCEL

Baltasar Porcel, Andratx, Mallorca (1937-2009), ha sido un escritor de largo recorrido, toda su obra ha sido escrita en catalán, si bien Concha Alós, se la tradujo al castellano, ya que ella fue su mentor en aconsejarle que escribiera. Baltasar Porcel, ha he escrito: Novelas, ensayos, guiones para televisión, etc. Aunque sus comienzos no fueron muy boyantes ya que tuvo que trabajar en diferentes oficios como: tipógrafo en el periódico Baleares, trabajó como periodista en la Vanguardia, última Hora, Destino Etc. ha sido un escritor fecundo que ha escrito novelas, narraciones, obras de teatros y ha sido presentador de televisión. Enamorado del Mediterráneo, ya que hasta su partida a Barcelona en donde ha vivido la mayor parte de su vida, su pueblo natal está a escasos kilómetros de ese mar que le enamoraba.

            Sus obras han sido traducidas al castellano, la mayoría de ellas por la prestigiosa escritora y traductora Concha Alós, con lo que le imprimió una nueva dimensión ya que han sido extraordinariamente traducidas. Es una pena que sus libros traducidos al castellano no hayan tenido -en Baleares la difusión necesaria-, y no digo en Cataluña. Desgraciadamente existen muchas personas de mentes cerradas que, sabiéndolo, no quieren aceptar ya de una vez, que el castellano es un idioma universal, el segundo idioma más hablado en el mundo y sigue creciendo sin parar. En fin, hay gente “para todo” allá ellos con sus mamarrachadas idiomáticas y negativas.

            Baltasar Porcel, era un hombre sencillo y abierto, así me lo demostró en mi encuentro con él. Antes de seguir debo decir que Porcel, obtuvo grandes premios literarios a lo largo de su vida, entre otros: Premio Nacional ¿…? De Literatura de la Generalidad de Cataluña (2007). No sé si me equivoco, pero que yo sepa, a lo mejor estoy en un error, si así es, pido disculpas. – Cataluña no ha sido nunca una nación, ni un reino, lo más que ha llegado a ser ha sido y es un condado. Premio de honor de las letras catalanas. Esto sí es correcto. Y otros premios que han avalado su categoría de escritor y ensayista con una escritura culta y depurada que ha sabido en sus libros resaltar con un lenguaje depurado, las bellezas que encierra Baleares, Mallorca y su pueblo natal Andratx.

            A Baltasar Porcel lo conocí a raíz de invitarle a que participara en la Cuarta Semana Cultural del año 1981. Lo llamé por teléfono a su casa de Barcelona y le invité a que participara en dicha semana cultural. Le dije que solamente podía pagarle el pasaje en avión y la estancia de una noche en un hotel. Reconozco que le llamé con un poco de miedo de que él no aceptara al no haber ninguna asignación monetaria, pero él aceptó porque según él, aprovechaba para visitar a su familia en Andratx y rechazó el quedar esa noche en un hotel, ya que, por la cercanía desde Palma a su pueblo, se quedaría en su casa y aprovecharía para pasar unos días con su familia.

Baltasar Porcel

            Fue un familiar quien fue a recogerlo al Aeropuerto el día de su llegada -un día anterior del día en que tenía que dar la conferencia-, por cierto, que dicha conferencia había despertado mucho interés, ya que, en esa época, Baltasar era ya un famoso escritor muy cotizado y reconocido en todos los círculos culturales de habla catalana y también castellana.

            El día de la conferencia quedamos en vernos en la plaza de España a las 9 de la mañana, ya que, a las diez horas nos tenían que hacer a ambos una entrevista en los Estudios Radio. Fue muy puntual y tras presentarme, aunque él ya me conocía, pues un par de años anterior habíamos coincidido en una conferencia del escritor Cristóbal Serra, fue cuando me presenté a él y hasta que lo invité a la conferencia dentro de la semana cultural, hablamos varias veces por teléfono. Como faltaba aún bastante tiempo nos fuimos a tomar un café a la cafetería Niza, pues los estudios radio estaban ubicados en el edificio Minaco, frente a donde está hoy ubicado el Cortes Inglés.

            A las 9, 50 estábamos en los estudios en donde nos recibió el director y el presentador, debo decir que ambos eran “amigos míos”. La entrevista se tenía que dar al día siguiente, por lo que las preguntas y las respuestas tenían que ser, como si fuéramos entrevistados ese día y no grabada el día anterior. Debo decir que para mí era todo un honor el ser entrevistado -yo que no era ni soy nadie- con un escritor de la talla de Baltasar Porcel. La entrevista fue extensa, pero la anécdota fue que muchas de las respuestas mías se tuvieron que grabar de nuevo en varias ocasiones, ya que yo siempre contestaba en futuro y no, en presente. En un momento dado Baltasar me dijo riendo Piensa que estás en mañana y no en hoy. Escúchame a mí. Pero en valde yo estaba en la mía y seguí contestando en futuro. Por lo que hubo que parar la grabación, pasamos a una salita y durante media hora estuvimos hablando de muchas cosas. Hasta que yo estaba relajado y se empezó otra vez la grabación -menos mal que no era en directo, y ahora sí, todo salió perfecto, al día siguiente la entrevista se dio en varias emisoras y algunos amigos y conocidos me felicitaron, pero a ninguno de ellos les conté la anécdota de la grabación.

            Me había cogido el día libre, gracias a la buena disposición y sensibilidad cultural de mis jefes. Fuimos a almorzar a un restaurante por la zona de la plaza España y con Baltasar estuve, disfrutando de su compañía y aprendiendo de su sabiduría hasta la hora de la conferencia, que fue un éxito de publico y se celebró en el salón de actos de la Caixa ubicado en las avenidas. Después del acto se celebró un aperitivo por la firma Ricard. Nos despedimos en la puerta del edificio de la Caixa y tras darle nuevamente las gracias por su colaboración, me dijo que siempre que lo deseara que contara con él. Por una cosa u otra, no volví a coincidir con él, en sus múltiples venidas a Mallorca. Un día leí en la prensa que Baltasar Porcel padecía una enfermedad muy grave, un tumor cerebral que acabaría con su vida en el año 2009. Lamenté su fallecimiento, como ser humano y por su talante caballeresco, abierto y generoso, nunca podré olvidar su gesto hacia mí de cercanía y amistad, descansa en paz allá donde te halles.

Marcelino Arellano Alabarces

Palma de Mallorca