COSTA TROPICAL, BELLEZA DE BELLEZAS, POEMA DE LOLI MOLINA
COSTA TROPICAL, BELLEZA DE BELLEZAS
En la Costa Tropical,
los soles son sentimientos
con aliento de belleza
que aspira la luz del cielo.
Escucho tu voz marina
en mi alma, flor de silencio,
donde relucen los besos
de la mar que hay en tu cuerpo.
La fecundidad del mundo
la concebiste en tu seno
acariciado por olas
que galopan por el tiempo.
La Costa Tropical ríe
para alegrar al viajero
que se entrega dulcemente
a tu ser siempre en progreso.
Sobre ti anhelo vivir
con tus hijos siempre en vuelo,
llevándote en los latidos
puros que riegan tus huertos.
Oh mi Costa Tropical,
loada eres en los versos
de poetas inmortales
que beben paz de tus pechos.
Loli Molina
Málaga
El poema «COSTA TROPICAL, BELLEZA DE BELLEZAS» de Loli Molina es una exaltación lírica de la Costa Tropical, destacando su belleza natural y su profundo vínculo emocional con la autora.
Desde el inicio, el poema establece un tono de admiración. La Costa Tropical se describe como un lugar donde «los soles son sentimientos con aliento de belleza», sugiriendo que la luz del sol infunde una sensación de belleza profunda y espiritual. La voz marina que la autora escucha en su alma se describe como una «flor de silencio», lo que sugiere una conexión tranquila y profunda con el mar, que comunica amor y serenidad.
La tercera estrofa celebra la fertilidad y vitalidad del lugar, destacando cómo la naturaleza y el tiempo se entrelazan a través de las olas. La imagen de la fecundidad «concebida en tu seno» enfatiza la relación casi maternal de la tierra con el mar, donde la naturaleza nutre y sustenta la vida.
La cuarta estrofa introduce una nota de alegría y hospitalidad. La Costa Tropical se personifica al reír y alegrar a los viajeros, sugiriendo que el lugar acoge y transforma a quienes lo visitan. La idea de «ser siempre en progreso» puede interpretarse como un reconocimiento de la evolución y crecimiento continuo de la región.
El deseo de la autora de vivir en la Costa Tropical, expresado en la quinta estrofa, refleja una aspiración de arraigo y pertenencia. La mención de «tus hijos siempre en vuelo» y «latidos puros que riegan tus huertos» añade una dimensión de continuidad y vida perpetua, destacando la conexión generacional y la fertilidad de la tierra.
El poema concluye con una alabanza explícita, sugiriendo que la Costa Tropical es loada por poetas inmortales que encuentran paz en su belleza, elevándola a un estatus casi mítico.
En resumen, el poema celebra fervorosamente la Costa Tropical, conectando el paisaje natural con una experiencia espiritual y emocional profunda.