Corazón que escucha XII
En el decurso de la historia, pocas veces la humanidad se ha favorecido de un tiempo tan repleto de opciones a la diversidad y, al mismo tiempo, con tantas carencias sociales como el que se está viviendo. Tal vez este fenómeno invite a replantearse que, lejos de sucumbir a la opinión pública sobre el hecho de que no se dispone de tiempo; se trata de todo lo contrario, lo importante es darse cuenta de que estamos hechos de tiempo y es de esa magnitud -que llamamos tiempo- de lo único que disponemos. En efecto, afortunadamente, en esta vida no todo es producción.
La cuestión es ¿cómo empleamos el tiempo?, ¿y en qué?, o incluso cabe la posibilidad de preguntarnos, si realizamos una gestión del tiempo adecuada y coherente con nuestro sentir interno. Algunos, por ejemplo, han optado por llevar una vida sencilla… y sería muy bello rescatar: ¿qué sería para usted el retorno a una vida sencilla? Y les insto a que escriban a: yugmarisa@gmail.com – dirigiéndose a esta sección: “Corazón que escucha” del Diario Granada Costa – respondiendo a esta cuestión, sobre la que me gustaría tratar en el próximo artículo.
Con estas palabras lo dejó escrito Anthony de Mello: “¿Qué se necesita para comprender la fórmula de la felicidad? Una sola cosa: la capacidad de escuchar”, Anthony de Mello [1]
Retomando algunos apuntes biográficos, cabe destacar que el sacerdote Anthony de Mello, nació el 4 de septiembre de 1931 en Santa Cruz, localidad ubicada en las afueras de Bombay, en la India. Ingresó como novicio en la Compañía de Jesús en 1947. Años más tarde en 1952, fue enviado a España para estudiar Filosofía y posteriormente a América para estudiar Psicología. Su adhesión a la Psicología Transpersonal, lo llevó a utilizar posteriormente en los retiros espirituales que dirigía, los métodos de Carl Rogers basados en el “dirigir sin dirigir”. Es fácil recordar, a modo de ejemplo, algunas de sus bellísimas obras: “El canto del pájaro”, “La oración de la rana”, “Sadhana. Un camino de oración”, y tantas otras preciosas huellas que dejó como legado sobre los caminos de sabiduría y conocimiento de la tradición cristiana e hindú.
Este verano, sin ir más lejos, a algunos de nosotros, en especial a los amantes de la historia y sus orígenes, nos alegra y nos sorprende descubrir que el Arte de la Caligrafía Medieval ha retornado. Un ejemplo de vida sencilla. Sí, me refiero al bello arte de escribir a mano, y aún con plumilla y tinta, como se hacía antaño. Y es que esta bellísima actividad se está recuperando e implantando, para el disfrute de todas las edades y públicos, desde los Monasterios hasta en algunas aulas escolares. A la vista está, que este tiempo del que estamos hechos no deja indiferente a nadie. ¡Son tiempos de cambio! En los que incluso el retorno a lo clásico ayuda para avanzar. Tal vez será preciso, de nuevo, tomar el impulso al pulso de la historia.
[1] Conferencia dictada por el padre Anthony de Mello, el 15 de Noviembre de 1986 en la universidad de Fordham, en Nueva York. Redescubrir la vida, Anthony de Mello.
Marisa Barros
Estimada Marisa: Avui en el correu electrònic, en un en-llas, has deixat un material Literari mol interessant,el llibre de Mariana Pineda, i la seva historia es mol dura, el llibre es mol interessant, ens va costa batan de trobar-lo, pro el varem aconseguir.
Et felicito per que he trobat material per les vacances:
Espero algun dia poder-nos Trobar. cordial ment, rep una forta abrasada de la
Maria Aurora. Fins a sempre. Pau i Bé