Coral Mª Auxiliadora de Zurgena 2
Esta es la historia de cómo un grupo de personas de un pequeño pueblo, decidieron hacer realidad su sueño, formar una coral que tuviese presencia más allá de las fronteras y suplieron la falta de medios materiales y formación específica, con esfuerzo, perseverancia, ganas de aprender e ilusión, mucha ilusión.
Esto ocurrió en la Iglesia San Ramón Nonato de Zurgena, una mañana de domingo después de la misa mayor.
Un grupo de feligreses entre los que se encontraban Blanca Robles Ramos, que expuso la idea que llevaba rondándole la cabeza mucho tiempo. Crear un coro. A su propuesta se unieron algunos de los feligreses y así se gestó La Coral Mª Auxiliadora.
Juan García Mirón nos cuenta, que la Iglesia de San Ramón Nonato de Zurgena data de mediados del siglo XVI d. C.
Fue construida en el mismo lugar donde estuvo ubicada una mezquita, para las posteriores ampliaciones se usaron terrenos adyacentes.
Zurgena, al tener iglesia propia, y formar una parroquia se independizó de Huércal–Overa y pasó a ser un municipio con identidad propia.
Nos cuenta su presidente, que la Coral Mª Auxiliadora, comenzó su andadura musical durante el curso escolar de 2009-2010, con diez mujeres y tres hombres, con ganas de aprender música, cantar, pasar un rato agradable y crear una actividad en la que poder hacer partícipe a todo su pueblo, directa o indirectamente.
Aunque la fundación data de 22/11/2011 con Juan García Mirón como presidente, Blanca Robles Ramos vicepresidenta, Herminia Jiménez Carrillo, secretaria, vocales María Domínguez y Josefa Valera.
Las dificultades económicas, la falta de formación musical, el tiempo disponible… lo superaron gracias a la entrega, las ganas de aprender y la ilusión de dar a conocer al pueblo de Zurgena y a la Coral Mª Auxiliadora dentro y fuera de nuestras fronteras.
La parte económica la solucionaron con las cuotas de los socios, venta de lotería y rifas.
Desde hace un tiempo cuentan con una subvención del Excelentísimo Ayuntamiento de Zurgena que les permite pagar parte de los gastos.
Cada uno de los participantes se encarga del coste de su vestuario, para los hombres traje y zapatos negros, camisa blanca y pajarita negra.
Las mujeres varían su indumentaria según la ocasión, cada cambio cuenta con el consenso de todas. Los trajes se los confeccionan ellas mismas o se los envían a la modista, según sus habilidades y/o poder económico.
Para dirigir el coro se pensó en Rosa María López Reche.
Según cuentan los componentes de la Coral, Rosa no solo era la directora, si bien se le pagaba por el servicio, no hay dinero que pague su dedicación y entrega. Desde el primer momento se convirtió en el alma del grupo, les enseñaba con cariño y paciencia, se creó entre ellos un vínculo muy especial. Rosa se encargaba de ensayos, actuaciones, lugares donde actuar, en fin, de todo menos de cantar, eso era responsabilidad de lo/as cantantes que de la mano de su directora lo hacían cada día mejor.
Entre semana ensayaban en la casa del cura, sin la profesora. Cuando les tocaba ensayar con la directora, lo hacían en el local de usos múltiples de encima del Teatro Municipal de Zurgena.
El primer concierto como Coral constituida se celebró en la Iglesia de San Ramón Nonato de Zurgena con motivo de la fiesta de Navidad.
Confiesan los participantes que aún recuerdan la ilusión y el miedo con que salieron a cantar, para ellos era su prueba de fuego.
(De izquierda a derecha y de arriba a abajo: Gustavo – Ramón – Antonio – Luis – Juan – Ginés – Francisco – María – Brígida – Herminia – Encarna – Emilia – María Teresa – Isabel – Francisca – Pilar – Ana – Paca – Isabel – Francisca – Blanca. Directora Rosa María).
Pero este sueño, esta odisea, no había dado más que el primer paso. Por delante había muchas etapas por superar y tenían que echar mano de su coraje, tesón, esfuerzo, ilusión y fe para alcanzar su objetivo.
La siguiente meta fue salir a cantar fuera de Zurgena. Actuaron en la rambla de Oria durante la fiesta en honor a su patrona la Virgen de las Mercedes.
A estas actuaciones las siguieron muchas otras como en la 5ª Semana de la Música el la Loma de Albox, en el Castillo de cuevas de Almanzora durante la antología de la zarzuela, en el Teatro Apolo de Almería, entre otras muchas. Siempre de la mano de Rosa María López Reche.
Pero la Coral aún tenía pendiente la mayor prueba, el mayor logro, el sueño por el que fundaron la Coral Mª Auxiliadora. Pero mientras tanto se seguirían preparando, perfeccionando su técnica y sus voces.
Fue en uno de esos ensayos donde su directora les propuso una representación a la que no pudieron negarse. ¡Ir a cantar al Vaticano!
Todo fueron preguntas: ¿cuándo, cómo, quiénes, cuánto les costaría y quién se encargaría de organizarlo?
(De izquierda a derecha: Antonio – Herminia – Paca – Isabel – Brígida – Francisca – Pepa – Pilar – Isabel – Encarna – Luís – María Teresa.)
Será en el III encuentro internacional de corales en el Vaticano el 24 de noviembre de 2014. Pueden ir los miembros de la Coral y un acompañante. El viaje se lo pagaban los asistentes. Las credenciales se pagan al Vaticano, cada uno las suyas. En cuanto a todos los trámites, permisos, contratar en una agencia el viaje en conjunto y cerrado, para que salga lo más económico posible. Todos los detalles que conlleva un evento de esta importancia correrán a cargo, como siempre de la directora.
Del Vaticano les mandaron las canciones que tenían que interpretar y el protocolo a seguir.
No dieron tregua al desánimo, todo el tiempo que les quedaba libre después de sus muchas ocupaciones diarias lo empleaban en prepararse para el gran día o mejor dicho, días.
La llegada a Roma fue emocionante, era tanta la ilusión por llegar al Vaticano que una de las mujeres se dejó el abrigo de cuero en el avión. El abrigo le costó un buen dinero y ella lo tenía en gran estima, pero en su ánimo pesó más el seguir disfrutando, con sus compañeros, del momento tan maravilloso que estaban viviendo, que abandonó a su suerte al abrigo, dándole libertad para cubrir otros hombros.
Peor suerte tuvo el presidente y su mujer pues el destino les jugó una mala pasada y que Juan se puso enfermo y lo ingresaron en el hospital. Como dice él demostrando su sentido del humor, “unos cantando y otros penando”
Los días siguientes fueron un frenesí de emociones.
Cantaron en varios idiomas, junto a las otras corales que, como ellos, asistieron al III concierto de corales en el Vaticano.
También cantaron la misa en la Catedral.
De izquierda a derecha y de arriba a abajo:
Antonio – Pilar – Francisca – Isabel – Paca – Isabel – María Teresa – Ginés – Ruperta – Francisca – Herminia – Brígida – Encarna- Luís – la niña es Teresa
La experiencia fue inolvidable. Habían conseguido ver realizado su sueño. Hacer visible a Zurgena en el mundo.
Pero esta historia no termina aquí.
Finalizado el viaje volvieron con más ilusión, si cabe, a sus actividades en la Coral.
Pasado un tiempo la directora, Rosa María López Reche, cesó en su cargo por motivos personales.
Desde entonces el director es Alejandro Guevara Martínez, que, recogiendo el testigo, sigue acompañando a la Coral Mª Auxiliadora a seguir el camino que sus miembros se plantearon, una mañana de domingo en la Iglesia de San Ramón Nonato de Zurgena.
Germana Fernández Pérez