A VUELTAS CON DON JUAN TENORIO
En los últimos años he venido buscado desde la víspera del Día de Difuntos, si algún promotor televisivo o teatral no tenía otra cosa mejor que ofrecer, y dedicaba su tiempo a presentar la gran obra mundial de José Zorrilla. En esta ocasión, el 2 de noviembre ha sido el gran escritor Jorge Bustos quien nos habla de la “Memoria amarga y feliz de Don Juan Tenorio”. Y lo dice en la contraportada de El Mundo. Y cuenta que acudió al Teatro Fernán Gómez de Madrid unos días antes, para ver una vez más la representación de Don Juan Tenorio.
Yo siento tristeza al comprobar en estas fechas, que tampoco los teatros se han interesado mucho por José Zorrilla, aunque este año el Fernán Gómez haya sido una excepción, pero las televisiones ninguna se ha molestado en estos últimos tiempos. Y hasta las iglesias también han bajado el tono de su celebración el día de los Fieles Difuntos. Creo que las familias de los fallecidos son los únicos que permanecen fieles a sus muertos y en su mayoría acuden a los cementerios para celebrar cerca con ellos sus mejores recuerdos.
Creo recordar, que de treinta años atrás, los dos primeros días de noviembre dos o tres canales competían incluso con diferentes sesiones de Tenorio en España. Y como he coincidido en varias ocasiones en Hispanoamérica en dichas fechas, debido a su intensiva religiosidad solían tener expuestas las películas, televisiones y teatros hasta quince días después de Difuntos y siguiente Día de los Santos. La razón de ello puede ser que allí y también aquí en Europa, ha decaído la práctica religiosa.
Afortunadamente esta obra internacional clásica de Don Juan Tenorio, como sucederá con Don Quijote de la Mancha, sobrevivirá a través de los tiempos y sus autores que fueron geniales con sus obras, resulta penoso que murieran miserablemente pobres.
