TOMA NOTA “Las palabras buscan siempre la verdad”

Como viene siendo habitual el evento: Los Sábados literarios en Motril cuenta con Escritores de gran talla literaria, de la mano del ilustre maestro POETA, premio Nacional de poesía don Antonio Carvajal y del presentador crítico literario Dionisio Pérez Venegas. El 10 de noviembre de 2018 fue la fecha de salida, se trata de un acercamiento y homenaje de reconocimiento a Poetas que hablan de su obra y recitan parte de la misma, es decir, un Encuentro Literario que además permite preguntar al Autor invitado; para esta ocasión de inicio del curso académico se ha contado con Jesús María García Calderón, a las 12 horas en la Casa de la Condesa, lugar donde se celebran dichos actos. Como no podía ser de otra manera antes de pasar a la entrevista que ha tenido la deferencia de concedernos, hagamos una reseña del Escritor homenajeado para la ocasión:

Jesús Mª García Calderón (nació en Badajoz en 1959), doctor en Derecho por la Universidad de Granada, ingresó en la carrera fiscal por oposición en 1985. Tras sucesivos destinos oficiales en Huelva, Sevilla y Lugo, en 2001 fue nombrado Fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, cargo que desempeña en la actualidad, tras sucesivas renovaciones con el apoyo unánime del Consejo Fiscal. Fue designado por el Gobierno en 2010, a propuesta de la Fiscalía General del Estado, como uno de los ocho vocales de la Comisión de Modernización del Lenguaje Jurídico que desarrolló sus trabajos, con la colaboración de la Real Academia Española, en el Ministerio de Justicia durante dos años, promoviendo especialmente la idea de construir un nuevo derecho a comprender que acabe con la habitual oscuridad del lenguaje jurídico y permita un desarrollo eficaz de los derechos fundamentales de los ciudadanos en su relación con la Administración y, en particular, con el sistema de justicia penal.

En 2015 fue nombrado hijo adoptivo de la provincia de Granada y Director de la Real Academia de Bellas Artes de la misma ciudad, en la que había ingresado desde 2010. En 2011 fue elegido académico de número de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de Granada.  Académico de honor de la Real Academia de Ciencias, Bellas Artes y Buenas Letras de Écija, y de la Real Academia de Córdoba, entre otros más, y desde 2016 es académico titular de la Academia Europea de Ciencias, Artes y Letras, con sede en París. Aunque ha desarrollado una amplia labor como poeta en los últimos 25 años, ha cultivado la prosa con la publicación de relatos y algunos ensayos. Su obra ensayística ha sostenido con frecuencia un tono multidisciplinar, con frecuentes alusiones a la literatura contemporánea y a su vinculación con el mundo del derecho, por ejemplo El derecho como espacio descreativo.

Sus primeros poemas y relatos aparecieron, a comienzos de los años 80. Su primer libro de prosa, Los regalos sombríos y otros relatos apareció en 2001. Destacan sus ensayos El Mal de la Muralla de 2013; La protección penal del Patrimonio arqueológico y Una ciudad traicionada. La ciudad de Badajoz como temperamento, ambas de 2016.

En 1991 obtuvo el  Premio de Poesía Florentino Pérez Embid de la Real Academia Sevillana de Buenas Letras con La provincia, libro al que han seguido otras publicaciones poéticas: Reos, 1991; La Moneda Secreta, 1996; Un Lugar en el Norte, 1998; Hacer es Destruir, 2003; La Soledad Partida (Antología 1991-2006), 2006; Los Nudos de la Vida, 2006; El Asombro Escondido, 2010; La Mirada Desnuda, 2011, y Las Visitas de Caronte, 2014.

Entre otros galardones destacan el Accésit del Premio Ángaro, el Accésit Premio Villa de Martorell y el Premio Meridiana para la defensa de la Igualdad.

Como articulista del Periódico de Información nacional sociocultural “Granada Costa Proyecto Nacional de Cultura” es un placer compartir y difundir la dedicación poética de alguien especial, porque creo que merece la pena hacer extensible un hecho insólito del mundo jurídico, que llama la atención tanto por su talento como por su sensibilidad. De ahí que haya pensado hacer una entrevista  a JMª García Calderón. Primero quiero felicitarlo por la labor y el aprecio que hace de las Humanidades, sobre todo en lo concerniente a su faceta poética. Por eso nos gustaría saber:

1. ¿Por qué escribes poesía?

Como decía Saramago, no siempre somos nosotros quienes tomamos las decisiones: A veces son las decisiones las que nos toman a nosotros. Con la poesía suele ocurrir a menudo. Quizá escriba poesía porque respeto mucho a quienes buscan la verdad y quisiera parecerme a ellos.

2. ¿Podrías hablarnos de tus modelos poéticos, como Pessoa, Machado u otros, hasta dónde los consideras maestros?

Esos dos nombres pueden ser decisivos para cualquier intelectual de nuestro tiempo. Quienes me conocen saben que tengo debilidad por Fernando Pessoa y su manera de afrontar el destino preciso del poeta. Los juristas tenemos una formación humanística algo desordenada y las influencias van y vienen pero eso, al fin y al cabo, también tiene sus ventajas. En mi juventud casi devoraba todo lo que caía en mis manos. En mi madurez he sentido la fascinación por Eliot o por Góngora, pero siempre, en definitiva, he vivido estas experiencias como un regalo imprevisto de la existencia. Como maestro, al margen de algún paisano contemporáneo, solo reconozco a mi amigo Antonio Carvajal porque cuando hablo con él me enseña a vivir y, como decía Rafael Guillén, sentir es más importante que saber.

3. ¿Cómo ves a la cultura y qué función y valor crees que desempeña en la sociedad, actualmente?

Sin cultura no hay libertad y hoy la verdadera cultura no es la que brota de instituciones domesticadas con fondos públicos y otros pesebres. Sufro mucho cuando contemplo cómo se destruye el enorme talento de tantos jóvenes y no tan jóvenes que no pueden abrirse paso en esta maraña egoísta de mediocridad reinante. Hay que rebelarse con respeto pero con energía, ser libres y exigir que la cultura tenga el protagonismo que merece en cualquier cambio social y no afrontarla como un elemento residual de la vida pública que se alimenta de las migajas del presupuesto y solo aparece en las páginas postreras del diario, siempre detrás de los deportes.

4. ¿Crees que se tendrían que revalorizar las Humanidades en el ámbito educativo. No es irrisoria la dedicación lectiva en Bachillerato de la Lengua y la Literatura?

Completamente. Es necesaria una revalorización pero no solo en el ámbito educativo … En el ocio, en la política, en toda la vida social este proceso resulta indispensable … estamos privando a nuestro futuro de referencias esenciales para tomar decisiones y para establecer los auténticos límites de la virtud.

5. ¿Cómo se puede hacer compatible el mundo de las nuevas tecnologías (NTI) con la dedicación a la lectura de los libros físicos.

El libro, como la caligrafía, no pueden desaparecer. Hay un ritmo interior en el alma que aún precisa la demora y el roce de la lectura sobre el tacto y el aire. Necesitamos un soporte inmediato y físico como es necesario dibujar la letra con la propia mano para comprender su virtud. El cerebro de los seres humanos aún tiene que ser alimentado con una cierta lentitud y templanza.

6. ¿Cómo se previene el riesgo de la manipulación de las NTI y el control de la privacidad?

La sociedad de nuestro tiempo es una sociedad impaciente dominada por la captura de datos a la que tenemos que someternos para subsistir, a la que alimentamos con nuestra sumisa actividad. Vivimos en un peligroso enjambre como nos recuerda mi admirado Byung Chul Han. El mundo binario exige una nueva formulación de la intimidad en la que el sujeto se ampara con frecuencia en el anonimato o se somete, de manera más o menos gratuita, a formas de exhibición masiva. En un mundo tan sucio, la intimidad ha dejado de interesar para trasladar el centro del debate hacia el riesgo de manipulación. Tener privacidad es tener la capacidad suficiente para no ser manipulado y eso solo se obtiene a través de la cultura y la honestidad.

7. Sin embargo los sentimientos de la intimidad, ¿por qué crees que deben ser compartidos desde la labor comunicadora del poeta?

El poeta de nuestro tiempo no suele transmitir su intimidad sino el reflejo de su intimidad en el poema. Aunque lo parece, no es lo mismo intimidad que intimidad poética. El poema aflora desde una voz interior que no siempre es la nuestra porque el poema refiere una impresión o vivencia colectiva que tenemos la suerte de encontrar azarosamente por el camino de la razón, pero en la que puede verse reflejado el lector. Opera como una especie de recuerdo colectivo que se revela de forma espontánea. De todas las intimidades, la del poeta es quizá la menos íntima porque pertenece a muchos. El buen poeta solo tiene la suerte de recordarla y ofrecerla a través de la lectura del poema a quienes no habían reparado en ella …

8. ¿Qué tienen en común los mejores poetas que ha conocido?

Quizá una síntesis de recato, humanidad, honestidad, discreción, modestia. Una extraña palabra: La decencia.

Francisco Velasco Rey