Comparte:

(Crónica de dos actos memorables)

   Dos fechas que, cuantos componemos el Grupo de Teatro Inquietudes, habíamos  esperado con ilusión. La primera, el sábado 16, asistimos al homenaje que Granada Costa había anunciado rendir a uno de sus más ilustres colaboradores, don Rogelio Garrido Montañana. El Grupo Inquietudes estuvo representado por Terechu Gómez-Reino y Maruja García, con su director Ramón Martí, que es quien suscribe esta reseña. Así se me ha encomendado, y no he podido sustraerme al deseo de hacerlo impulsado por la emoción que me produjo comprobar el sincero reconocimiento del señor Garrido Montañana por las muestras de admiración y cariño recibidas de parte de todos los asistentes.

IMG_0035 IMG_0001 IMG_0004 IMG_0010 IMG_0016 IMG_0019 IMG_0024

   Presidió el acto don José Segura Haro, Presidente del Club Granada Costa, acompañado por Inmaculada Rejón, tal vez la más digna representante entre cuantos componemos tan prestigiosa asociación. Tras la comida, desarrollada en un clima de absoluta fraternidad, el señor Garrido Montañana leyó una oda escrita para la ocasión, en la que resaltaba las excelentes cualidades humanas de su amigo el señor Segura, y, fundamentalmente, su agradecimiento por la distinción conque se le honraba. Don José Segura, a continuación, le hizo entrega de una corona de laurel con la que, de manera entrañable, simbolizaba la admiración y el cariño que unánimemente se le rendía desde Granada Costa. Tras este gesto de simpatía, resaltó las excelencias que como amigo y hombre eminente se aunaban en la persona que, por su sencillez, quiere ser para todos simplemente Rogelio. Este nos obsequió con un libro recopilatorio de semblanzas suyas escrito  por muchos de sus amigos.

Homenaje rogelio 3d

   Nos despedimos con un entrañable abrazo del justamente calificado Ilustrísimo señor don Rogelio Garrido Montañana, quien, sin embargo, en todo instante nos había demostrado su grandeza de espíritu y su talento con la humildad que le caracteriza, evidente muestra de categoría intelectual y humana, instándonos a considerarle simplemente Rogelio, el amigo. (!Hermosa cualidad la de anteponer la amistad a cualquier vanagloria!)

                                                   *                    *                   *

   Y llegó el día 18, la fecha anunciada para la actuación del Grupo de Teatro Inquietudes, que me honro en dirigir, en la prestigiosa Sala barcelonesa Luz de Gas.

Agotadas con antelación las entradas, como en ocasiones precedentes, pudimos ver la sala abarrotada de un público selecto y espectante, con la satisfacción añadida  para nosotros de  saber que contábamos con la asistencia de don José Segura, hombre admirable no sólo por su eficiencia para presidir con acierto una empresa tan compleja como Granada Costa, sino por su sencillez y afabilidad. Auténtico mecenas incansable en su continuo afán por descubrir talentos y difundir la cultura, todo con ejemplar filantropía. Además, nos enorgullecía saber que enriquecería nuestra obra la actuación conjunta de Inmaculada Rejón, invitada por nosotros con el exclusivo propósito de rendirle un más que merecido homenaje.

Merecido no sólo por sus méritos artísticos, sino por ser una excelente y queridísima  amiga. Los componentes del Grupo Inquietudes estábamos impacientes  por ofrecer al público el regalo extraordinario que para todos suponía la intervención de nuestra estrella invitada. Pero antes de dar comienzo la función, permítaseme que exponga un breve análisis de cada una de las componentes del Grupo, que hace tiempo que esperan de mí  y creo que les debo, por las grandes satisfacciones que siempre me han proporcionado.

   Sin que el orden establecido signifique preferencia por ninguna, puesto que todas ocupan un lugar idéntico en mi ámbito afectivo, he determinado comenzar por Margarita, afán constante de superación, tesón inagotable y acaparadora de constantes aciertos en los diferentes cometidos que afronta, pues lo mismo se atreve con la farsa que con lo dramático.

   Tere, pizpireta y grasiosa como gaditana ejemplar, a quien el temperamento arrebata a su inteligencia, aunque no en perjuicio de la consecución de sus compromisos interpretativos, ya que siempre sale airosa de la escena. Buena muestra nos dio recitando tres sonetos de Rafael de León cargados de pasión y de   erotismo.

Recital Poético del Grupo Inquietudes en la sala Luz de Gas celebrado el 18 de Mayo de 2015 Recital Poético del Grupo Inquietudes en la sala Luz de Gas celebrado el 18 de Mayo de 2015 Recital Poético del Grupo Inquietudes en la sala Luz de Gas celebrado el 18 de Mayo de 2015 Recital Poético del Grupo Inquietudes en la sala Luz de Gas celebrado el 18 de Mayo de 2015 Recital Poético del Grupo Inquietudes en la sala Luz de Gas celebrado el 18 de Mayo de 2015

   Menchu, !mi querida Menchu!, son muchas las satisfacciones que me has proporcionado con tus magistrales aciertos, pues de todos es sabido que te toca lidiar siempre con los toros más bravos, consiguiendo salir, invariablemente, por la puerta grande de la plaza. Me ha parecido oportuno el símil, habida cuenta de los dos morlacos con los que te has enfrentado en esta última ocasión y, como siempre, con éxito.

   Mari Luz, otra de mis debilidades. Nadie como tú pisa el escenario, con soltura y gracia incomparables. Ni nadie como tú se esfuerza tanto por quedar bien, me consta, bien lo demuestran los magníficos resultados que llevas obtenidos. Bueno, es verdad que a veces enmiendas la plana a los poetas cambiándoles algunas palabras, pero qué importa, éso  quizás sea consecuencia del temperamento, que te arrastra y no te permite concentrarte más.

   Maruja: hablar de Maruja me cuesta un poco, ya que todos los elogios me resultan insuficientes para recompensarle por la satisfacción que a todos nos proporciona con sus interpretaciones magníficas. Además del agradecimiento que le debo por su constancia y disciplina, cualidades propias de una verdadera profesional, y por las que en ocasiones alcanza en el escenario un altísimo nivel.

   Terechu, justo es reconocer en ti a una auténtica artista, poseedora de una amplia gama de matices histriónicos y auténtica vocación interpretativa. ¡Qué  gran Actriz, con mayúscula,  se ha perdido el Teatro! Tal vez, ignorándolo, albergas en tu interior la semilla de algunas grandes damas de la escena, pues no cabe duda de que tus transformaciones interpretativas resultan siempre sorprendentes.

   He dejado para el final a nuestra venerable Rosa, concertista de piano a quien consideramos como la corona que ostenta con orgullo el Grupo de Teatro Inquietudes. Rosa es humilde porque es importante, su figura sentada ante el piano se nos muestra nimbada por una luz deslumbradora, a la vez que embellece con sus ejecuciones de fondo el cometido de nuestras intérpretes. Ella sabe subrayar con sus melodías cada frase que la recitadora va desgranando en escena, revalorizando de ese modo lo que ésta pretende transmitir al público. En el intermedio, además, tuvo la gentileza de deleitarnos interpretando Verano Porteño, de Piazzola. Gracias, Rosa, por tu entusiasta colaboración.

   Y, temeroso de haberme extendido demasiado, en una transición brusca, levantamos el telón, anticipando ya que el éxito fue clamoroso. El público, absolutamente entregado, aplaudió incansable. Y tengo que destacar  la intervención de Inmaculada Rejón, que fue, como se esperaba, fabulosa. El público aplaudió sorprendido y enfervorizado sus dos interpretaciones. Primero el Padrenuestro, que emocionó tanto que arrancó lágrimas de muchos espectadores. Más tarde, y rindiendo homenaje a Carmen Amaya y a Barcelona, la célebre creación del maestro Alonso con letra de Rafael de León Esa Carmen. Los espectadores escuchaban erguidos y adelantados en sus butacas. Por un instante, todos parecía que se preguntaban:

                                        -¿Quién es la mujer que canta?…

                                        -!Inmaculada Rejón!

                                        Pues diríase que un ciclón

                                        atesora en su garganta.

                                        Pues cuando su voz levanta

                                        y la quiebra en un quejío

                                        es tanto su poderío

                                        que hasta Juana se levanta.

                                        Y envuelta en melancolía

                                        dice Concha emocionada:

                                        -Inma Rejón es Granada.

                                        !Inma es Andalucía!

 El aplauso fue ensordecedor.  Nuestros deseos se habían cumplido. La satisfacción nos embargó a todos los que la admiramos y la queremos. Inmaculada había cantado en Barcelona y había triunfado.

 

Ramón Martí.

Deja un comentario